Ingredientes
1 taza de harina integral de trigo
1 taza de harina semi integral de espelta
3/4 de taza de maicena (harina de maíz)
1/4 de taza de sirope de arce
3 cucharaditas de polvo de hornear
1/4 cucharadita de sal
2 huevos L batidos
1 taza de leche
1/4 taza de aceite de girasol
1 taza de arándanos frescos o congelados
100 g de pepitas de chocolate
1 cucharada de vinagre de manzana
Para el crumble
100 g de harina
100 g de azúcar moreno de caña
100 g de mantequilla
2 cucharadas de copos de avena
De 10 a 12 muffins
Preparación
Engrasar los moldes de muffins o cubrirlos con cazoletas de papel para hornear, reservar.
En un bol mezclar las harinas, la levadura y la sal. Hacer un hueco en el centro de la mezcla seca, reservar.
En otro bol mezclar los huevos batidos, el sirope, la leche, el aceite de girasol y el vinagre.
Agregar los líquidos, de una sola vez, a los secos y mezclar hasta que se integren (la mezcla debe quedar grumosa). Mezclar excesivamente la masa puede dar como resultado muffins de textura dura.
Añadir los arándanos a la masa, remover ligeramente para repartirlos, incorporar el chocolate. Reservar algunos arándanos para decorar.
Repartir la masa en los moldes que tenemos preparados, llenando cada molde unas 3/4 partes del total.
El crumble
Decorar los muffins con un poco de crumble, ver receta aquí.
Hornear a 180º durante 20 minutos o hasta que estén dorados.
Si los hacemos de tamaño mini, reducir el tiempo unos 8 minutos, si los hacemos super grandes, añadir unos 10 minutos más al horneado.
Enfriar en los moldes sobre una rejilla durante 5 minutos. Desmoldar y servir tibios.
Ya veis, una explosión de color!, y doy fe, también de sabor.