A estas alturas, sabida es por todos mi querencia por los frutos rojos. Un ejemplo de ello lo tenéis bien a mano, la salsa de la última receta, el acompañamiento de unas mini tartitas de queso. Tampoco he podido resistirme a probarlos en crumbles, tartas, pasteles y cupcakes.
Y es que no puedo evitar comprar un par de cajitas cada vez que los veo en el supermercado y, ya en casa, guardarlos en el congelador para tenerlos a mi entera disposición el día en que me dé por hacer la receta de esos pastelitos que acabo de ver por Internet, en una revista o en ese libro de cocina que tanto me gusta.
Pues bien, la receta de hoy es muy parecida a otra que preparé hace ya algún tiempo, la de unos muffins de arándanos que, hasta este momento, creía insuperable. Hasta el instante en que di el primer mordisco a uno de estos muffins que estáis viendo en vuestros monitores. Están tan jugosos, tan esponjosos, dura taaaaanto su jugosidad que podréis preparar un par (o más) de hornadas para tenerlos disponibles para el desayuno de toda la semana. Así, cada día lo empezareis con un poquito más de energía, optimismo y buen humor. Porque si los acompañáis de un café o un té, el bocado será aún más irresistible. Son súper suaves.
Además, en su interior, están cuajados de moras y frambuesas. Tanto es así, que cuando los saquéis del horno os parecerá que alguna ha intentado escapar.
Muffins de moras y frambuesas:
Receta del libro The Hummingbird Bakery Cake Days, recipes to make every day special, p.50
INGREDIENTES (para 8 muffins bien grandotes o 10-12 muffins de tamaño normal)
300g de harina
155g de azúcar
1 cucharadita de levadura química en polvo
1/2 cucharadita de bicarbonato
1/4 de cucharadita de sal
250mL de leche entera
2 huevos grandes
1 cucharadita de extracto de vainilla
85g de margarina fundida
50g de moras
50g de frambuesas
PREPARACIÓN
Precalentamos el horno a 190ºC.
Mezclamos la harina con 115g de azúcar, la levadura, el bicarbonato y la sal en un bol grande.
En una jarra o pequeño cuenco, mezclamos la leche con los huevos y la vainilla.
Hacemos un hueco en el centro de la mezcla de ingredientes secos y, mientras batimos, vertemos, poco a poco, la mezcla de leche. Batimos hasta obtener una mezcla homogénea. A continuación, agregamos la margarina y volvemos a mezclar hasta que se integre.
Añadimos los frutos rojos y, con una espátula de goma, los repartimos entre la masa con suavidad.
Dividimos la mezcla en los papelitos de muffins y espolvoreamos sobre ellos el azúcar restante. Horneamos 25-30 minutos a 190ºC. Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Un besazo!!!
Fuente: este post proviene de Mi recetario por Elena Pilar, donde puedes consultar el contenido original.
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