Natillas caseras ,historia:
Cómo hacer natillas caseras. Un postre tradicional que he preparado hoy en su versión más clásica. Hoy en día se hacen natillas de chocolate, fresa, dulce de leche, café... una gran gantidad de añadidos para darle variedad a un postre que le gusta a todo el mundo de la manera tradicional. Lo bueno que tienen las natillas caseras, es que puedes servirlas en cualquier ocasión. En el día a día, puedes hacer una buena cantidad e ir tirando en los días sucesivos, pues solo te va a costar 25-30 minutos prepararlas. En una celebración, como puede ser un cumpleaños o una comida familiar por cualquier motivo, serán el colofón perfecto a una buena comida o cena.
Debido a la sencillez de sus ingredientes, su reducido coste y su enriquecedor aporte alimenticio, el origen de las natillas se sitúa en los conventos a lo largo de Europa. Por sus características, constituía un plato idóneo en los conventos, donde se fomentaba la cocina dulce y una cultura de austeridad que potenciaba el aprovechamiento máximo de todos los alimentos. Otras teorías sitúan su origen en la repostería francesa, como consecuencia de sus repetidas épocas doradas. Donde realmente se empezaron a conocer fue en la época de la República Romana, donde surgieron las primeras trazas de lo que hoy conocemos como “cocina mediterránea”. La posterior introducción de las especias durante la Edad Media y la recuperación de los placeres mundanos en el Renacimiento, provocaron que las natillas evolucionaran hasta algo muy parecido a lo que conocemos en la actualidad, ya que añadieron vainilla y canela.
Ingredientes
6 cucharadas soperas de azúcar
450 ml de leche
La piel de 1 limón
Esencia de vainilla al gusto
250 ml de nata (crema de leche) líquida (crema de leche en América)
Canela en rama, 1 palo
Canela en polvo al gusto
6 yemas de huevo
25 g de fécula de maíz
Esencia de limón al gusto Vídeo paso a paso:
Si quieres ver la receta con el paso a paso por escrito pincha este