Sin lugar a dudas echaré de menos la gastronomía Española y una rica sidra asturiana, pero también se que tengo un abanico de platos y recetas por conocer aquí. Me ha quedado claro según leo que, Holanda tiene influencia asiática en algunas de las preparaciones de sus platos, como también recetas que abarcan aproximadamente 100 años de tradición. He leído en otros blogs de cocina que, la comida holandesa es algo simple y sosa dejando de lado la imaginación y la espontaneidad a la hora de jugar con los ingredientes en la preparación de las recetas. Honestamente no me atrevería a dar un juicio sobre la gastronomía de un país, refiriéndome a ella como “simple y sosa” creo que en cada país, la cultura, el paladar y las costumbres son diferentes, claro está. Respeto mucho la tradición y la preparación de diferentes platos, en mi caso y en algunos de ellos siempre verás que voy a sustituir la harina de trigo por alguna alternativa sin gluten.
Desde que llegue he visto que ámsterdam es una ciudad para comérsela, la ciudad de mis sueños “quesos everywhere” es una locura de quesos. Los supermercados cierto es, que incitan mucho a la compra de comida “directo a la sartén” pero también a la compra de productos frescos y vegetales, muchos vegetales.
Se dice que las personas holandesas están entre los más altos del mundo, las mujeres tienen una media de 1,71 metros y los hombres 1,84 metros aunque no siempre fue así, antes eran los más bajos de Europa. Algunos estudios sugieren que este cambio se debe a qué se encuentran en un entorno favorable y también en la selección natural. Se dice que en los últimos 150 años los holandeses han experimento un aumento de 20 cm. de estatura, está superioridad se atribuye a varios factores, tanto genéticos como también el entorno y una explicación popular lo atribuye a una buena alimentación, donde los lácteos juegan un papel importante en su consumo. Indistintamente sí me harto a comer quesos como sí no hubiera mañana, mi genética seguirá intacta con mis 1,68 metros de altura (creo que la más alta de mi familia).
Como en Venezuela y España, los Holandeses tienen un horario distinto para comer, el desayuno se toma muy temprano entre las 08:00 y 09:00 suele ser fuerte y variado, la comida (lunch) se toma entre las 11:00 y 13:00 y es algo más flojo, puede ser una ensalada o un sándwich, la cena es considerada el plato más importante del día y se toma sobre las 18:00 y 20:00 se suele cocinar un plato más elaborado y variado como por ejemplo un Rijsttafel o Erwtensoep este último es una sopa de guisantes, que tiene una pinta deliciosa y encaja perfectamente para preparar en los meses de invierno.
El idioma es algo que me preocupaba mucho a la hora de tomar está decisión, al llegar me di cuenta que la mayoría, por no decir todos en esta ciudad hablan inglés y en cualquier tienda basta con decir ¡Hello! para que automáticamente el chip cambie y te empiecen a hablar en inglés.
En efecto el Holandés es un idioma que iré aprendiendo según pase el tiempo, ya que he leído que está considerado un lenguaje difícil de aprender, se necesitan aproximadamente entre dos años y medio o tal vez tres años para hablar con cierta fluidez. No obstante el tiempo para aprender depende de cada persona, el interés y un buen plan de estudio para lograr obtener resultados en el menor tiempo posible.
Tengo tanto por visitar, por conocer, por cocinar, por comer, que a veces se me hace difícil saber por donde empezar. Lo más importante y lo que más me gusta de toda esta nueva etapa es la palabra “empezar” es tan bonita, viene llena de posibilidades, nuevas aventuras, experiencias que estoy tan entusiasmada y feliz de comenzar a contarte todo, según vaya avanzando. Así qué es hora de empezar, sígueme para seguir al tanto de mi crush desde amsterdam.
Fuente: este post proviene de Food is my crush, donde puedes consultar el contenido original.
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