Éste pastel de nueces o como dirían los alemanes, Nusskuchen, ya que es muy popular allí, y no me extraña nada, pero nada, nada, ya que es un pastel o bizcocho diría yo, ligero, jugoso, y os puedo asegurar que muy, muy rico, no os arrepentiréis si lo preparáis.
Ya se que podéis pensar que al llevar las nueces no es posible que quede ligero y jugoso, pues así es, a mi me sorprendió la primera vez que lo hice, ya que no ha sido la única, ni sera la última.
Como preparar el Nusskuchen:
Tenemos que empezar pelando las nueces y partiéndolas a trocitos pequeños.
Partir igual el chocolate.
Separar las claras de las yemas.
Montar las claras con una pizca de sal, montan mejor, a punto de nieve y reservar.
Tamizar la harina con la levadura, la canela y la sal.
Ablandar la mantequilla a punto pomada, o sea blanda pero no derretida, se puede en el microondas o sacándola a temperatura ambiente una hora antes.
Montar con varillas la mantequilla blanda, no derretida, con el azúcar, dejar hasta que la mezcla blanquee.
Añadir una a una las yemas mientras sigue montando, y seguir hasta que doble su volumen.
Echar las nueces y el chocolate, envolver bien pero ya con una lengua o cuchara de madera.
Ahora vamos echando un poco de la mezcla de harina, envolver bien y echar un poco de las claras montadas, así hay que ir alternando harina, claras hasta echarlo todo.
Cuando esté bien integrado todo echar en el molde forrado con papel de horno y hornear.
Como veis he utilizado un molde alargado, pero se puede hacer en cualquiera, lo que sí hay que forrarlo, ya que se desmoldará mejor.
Horno precalentado arriba y abajo a 180º / Hornear con la bandeja en el centro 1 hora.
Dejar enfriar unos 10 minutos antes de desmoldar.
Cuando esté bien frío espolvorear azúcar glas por encima.
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