Hace mucho tiempo que hago este pan y ya era hora de tenerla aquí en el blog, siendo unos de los panes favoritos en mi casa. No hay semana que no lo haga, suelo hornear pan dos veces en semana ya que me encanta su sabor, y es que los dátiles y los anacardos le da un toque muy rico a la masa del pan. Suelo hacerlo sin el molde dándole un aspecto más rústico pero esta vez quería darle un aspecto tipo pan molde.
Es un pan sencillo y muy fácil de hacer, perfecto para personas no expertas como yo. Aunque no sea una experta en este mundo de masas, os puedo decir que me encanta ojear libros, foros y webs, y llevarlo a la práctica así que me propongo a mi misma publicar algunos de los panes que voy probando, elaborando y horneando, haber que tal me salen...
Os saldrá con estos ingredientes 1 pan de molde. Allá vamos...
Ingredientes:
400 gr. de harina de fuerza + 50 gr. para espolvorear la superficie y manejar la masa.
1 1/2 cucharadita de sal.
8 gr. de levadura fresca panadera.
300 ml. agua templada.
1 cucharada de miel.
50 gr. de anarcados sin sal picados.
4 dátiles troceados sin hueso.
Elaboración:
Ponemos los ingredientes secos todos juntos en un mismo recipiente (harina, sal, anacardos y dátiles). Diluimos la levadura fresca con el agua templada. Vertemos el agua con la levadura diluida y la miel sobre los ingredientes secos. Mezclamos los ingredientes con una cuchara de madera.
Espolvoreamos harina sobre la superficie de trabajo y amasamos unos 8 a 10 minutos. Si nos cansamos paramos unos minutos y seguimos amasando, al principio notaremos que la masa queda muy húmeda pero poco a poco se integrarán bien los ingredientes a la masa.
Primer levado: Dejamos la masa reposando en un recipiente amplio enharinado, cubrimos con papel film y lo dejamos levar 1 hora en un lugar cálido.
Transcurrido este tiempo notaremos que la masa ha crecido. Enharinamos la superficie de trabajo, ponemos la masa sobre la zona que vamos a trabajar y desgasificamos la masa, esto lo haremos hundiendo las yemas de los dedos en la masa para que suelte el aire. Amasamos unos 2 minutos, veremos que la masa es más manejable y le damos forma rectangular.
Engrasamos con aceite el molde que vayamos a usar y colocamos la masa en el molde. Ahora haremos el segundo levado: encender el horno arriba y abajo, con la rejilla en medio y a una temperatura de 50º no sobrepasar esta temperatura. Tapamos con papel aluminio y dejar reposar la masa 45 a 50 minutos, veremos que la masa crece bastante.
Sacamos la masa del horno, subimos la temperatura a 220º, introducimos la bandeja de horno en el último peldaño con un recipiente lleno de agua y dejamos calentarse unos 20 minutos.
Ya caliente el horno introducimos el molde y lo dejamos horneándose durante 30 minutos aproximadamente. Dejamos enfriar sobre una rejilla hasta que esté templado y sea fácil después desmoldarlo.