Como en todo, hay infinidad de recetas, depende de la región en donde se realice, varían las especias utilizadas que acompañan al jengibre, si se usa miel o no, mantequilla, manteca… depende de la textura que quieras conseguir, yo como siempre he seguido un popurrí de recetas, utilizando los ingredientes que estaban en la mayoría.
Ingredientes:
250 grs. de miel Luna de miel
250 grs. de Harina
100 grs. de Azúcar Glas
1 bolsita de levadura química
10 cl de Leche templada
1 bolsita de Azúcar avainillado
80 grs. de mantequilla en pomada
1 cucharada de café de cada una de las siguientes especias: Jengibre en polvo, anís verde molido, nuez moscada rallada y canela en polvo.
Preparación:
En un bol se echa la harina, los dos azúcares, la levadura y todas las especias, lo revuelves.
Se calienta la miel en el microondas o en un cazo y se echa en el recipiente donde hayas puesto la mezcla de la harina.
Se remueve toda la mezcla con una cuchara de madera (así lo aconseja la receta que yo leí), verás que es una mezcla muy dura, vamos que el gimnasio te lo puedes saltar ese día.
Se incorpora poco a poco, la mantequilla, una vez integrada, un huevo, luego el otro y por último la leche tibia. La masa poco a poco se va haciendo más blanda.
Se forra un molde con un poco de aceite o mantequilla y se espolvorea de harina, lo extiendes por todo el molde y tiras el exceso.
Vierte la mezcla en el molde y al horno. El horno puede estar precalentado a 160º. La receta que yo seguí en su mayoría ponía que horno sin precalentar porque así quedaba el pan más crujiente por fuera y bien hecho por dentro. Pero como la mayoría de las recetas que vi ponía horno precalentado, yo lo precalenté y lo tuve una hora. Depende de cada horno, pero después de ésta experiencia, os recomiendo mirarlo a partir de 40 minutos, ya sabes, pincha en el centro y si sale seco el palillo, está listo.
Se desmolda cuando esté totalmente frío y lo guardas envuelto en papel de aluminio.
Leí que la miel no era imprescindible para ésta receta, pero que forma parte del sabor tan característico del jengibre. Se aconseja utilizar miel de flores, pero también se usa la de naranjo, acacia o castaño, si se quiere un sabor más delicado. Para esta receta he utilizado Miel de Acacia, de la empresa Tierra y Oro, S.A., cuyo compromiso con el medio ambiente, les ha llevado a seleccionar mieles originadas en la agricultura biológica. Luna de Miel es una de sus marcas, su miel proviene de lo que llaman “colmenas en regiones preservadas”, donde se respeta a las abejas y su entorno. Visitad la web que es bastante interesante.
Gracias por vuestras visitas y comentarios.