Buenos días, ¿qué tal ha ido la semana?
La entrada de hoy llega con un poco de retraso. Normalmente termino de preparar la entrada de los lunes el domingo por la noche después de cenar, pero es que este fin de semana no he parado casi por casa. El jueves pasado fui al centro de Londres a turistear un poco, el viernes fui a un pueblo al lado de donde vivo un poco más grande con muchas más tiendas, el sábado volví con otras aupairs y ayer volví al centro de Londres ya que había una quedada de aupairs internacionales y luego fuimos al río a un festival donde quemaban una maqueta de Londres. Con todo este movimiento y aunque no he vuelto muy tarde a casa me metía directa a la cama además aún no me acostumbro del todo a despertarme tan pronto e irme tan temprano a la cama. Todavía no tengo una rutina establecida ya que no he empezado a trabajar como tal, cuando ya empiece la rutina con los niños supongo que la cosa será distinta.
La receta de hoy está sacada del libro de hummingbird bakery. Es un bizcocho un poco denso y con un intenso sabor a limón, os tiene que gustar mucho el limón. Si no os gusta mucho este sabor podéis hacerlo sin el glaseado ya que el bizcocho en sí tampoco tiene tanto sabor a limón. Os dejo con la receta y con alguna recomendación.
Ingredientes
320 g de azúcar
3 huevos
La ralladura de 2 limones
350 g de harina
1 y 1/2 cucharadita de levadura
1 cucharadita de sal
250 ml de leche
200 g de mantequilla derretida
Ingredientes para el almíbar
Zumo de un limón
50 g de azúcar
100 ml de agua
Precalentamos el horno a 170º
Batimos los huevos con el azúcar y la ralladura de limón.
Añadimos un tercio de la harina previamente tamizada junto a la levadura y la sal.
Vertemos un tercio de la leche.
Repetimos el proceso hasta incorporar toda la harina y toda la leche.
Incorporamos la mantequilla derretida y templada.
Vertemos la masa en un molde previamente engrasado y horneamos unos 75 minutos.
Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla sin desmoldar.
Mientras preparamos el almíbar poniendo el zumo de limón, el azúcar y el agua en un cazo.
Lo llevamos a ebullición y bajamos el fuego a fuego medio bajo.
Dejamos que reduzca y retiramos.
Vertemos el almíbar sobre el bizcocho y dejamos que repose en el molde un poco antes de desmoldar.
Notas:
Con el almíbar el bizcocho queda muy blandito así que os recomiendo esperar un poco para desmoldarlo.
Por este motivo este bizcocho está más rico al día siguiente ya que habrá absorbido el almíbar y estará más firme.
Nos vemos el sábado con una nueva receta y el domingo también habrá ya que el blog cumple dos años y os seguiré contando mis peripecias por Londres.
Feliz semana :)