Este pan es típico de una de las más importantes festividades del año en México, el Día de los Muertos o de los Difuntos, que tiene un significado trascendental para el pueblo mexicano y que se celebra con gran devoción.
El significado de su estructura dice que las partes con forma de huesos hacen referencia a las extremidades humanas, el centro en la parte superior simboliza el cráneo, las lágrimas laterales recuerdan a los fallecidos y la forma redondeada representa el ciclo de la vida y la muerte.
El resultado es un bollo tipo brioche que esta muy bueno, me recuerda un poco al roscón.
Espero que os guste!!!
Ingredientes:
Para el prefermento:
70 gr. de harina de fuerza
90 gr. de leche
20 gr. de azúcar
2 huevos M
25 ml. de agua de azahar
20 gr. de levadura fresca de panadería o 7 gr. de levadura seca de panadería
Para la masa principal:
Todo el prefermento.
330 gr. de harina de fuerza
80 gr. de azúcar
1 yema
5 gr. de sal
Ralladura de una naranja.
95 gr. de mantequilla.
1 cdta. vainilla en pasta o extracto
Para el glaseado:
50 gr. mantequilla
Azúcar
Preparación:
Mezclamos bien todos los ingredientes del prefermento en un bol, cubrimos con film y dejamos que dupliquen su volumen una hora aprox.
Ponemos en el bol de la amasadora (o en un bol normal si se va a amasar a mano) todos los ingredientes de la masa principal y el prefermento, vamos amasando hasta que desaparezca la harina.
Lo cubrimos con film y dejamos que repose a temperatura ambiente durante 30 minutos.
Después de este reposo incorporamos la mantequilla, que estará blandita y seguimos amasando otros 10 o 15 minutos, hasta que nuestra masa sea vea elástica y manejable
Hacemos una bola, la ponemos en un bol engrasado y tapamos con film transparente. Otra opción es hacer la masa por la noche y en este punto dejar a temperatura ambiente una hora y después guardar en el frigo toda la noche; al día siguiente sacamos, dejamos que atempere y seguimos con la receta.
Dejamos levar en un sitio cálido, hasta que doble su volumen, unas 2 horas (depende un poco de la temperatura de nuestra casa).
Espolvoreamos un poco con harina la mesa de trabajo y ponemos nuestra masa, desgasificamos presionando.
Preparamos la bandeja de horno con papel vegetal.
De la masa quitamos 100 gr. (son para hacer los adornos) reservamos.
El restos de masa la dividimos en dos. Damos forma de bola tensionando la superficie y las vamos depositando sobre la bandeja de horno.
Para que los adornos se mantengan firmes durante el horneado añadimos a los 100 gr. de masa unos 3-4 gr, de harina, amasamos hasta que desaparezca la harina.
Dividimos la masa en: 2 porciones de 10 gr. cada una, con ellas haremos bolitas que simbolizan la cabeza. El resto de masa en 4 porciones de 20 gr. cada una, que simbolizan los huesos.
Para formar los huesos, que irán colocados encima del bollo en forma de cruz, hacemos rodar cada una de las 4 porciones de masa entre los dedos ligeramente abiertos, de manera que queden unas pequeñas hendiduras en la masa. Los colocamos encima del pan y en el centro donde se cruzan, colocamos la bolita que será la cabeza.
Tapamos con film y dejamos que vuelvan levar hasta que doblen su volumen una hora y media, depende de la temperatura de nuestra cocina.
Media hora antes de que el proceso de fermentación finalice, encendemos el horno a 180ºC calor arriba y abajo.
Horneamos durante unos 25 o 30 minutos , si vemos que se nos dora en exceso cubrimos con papel de aluminio.
Una vez horneados, retiramos los panes a una rejilla, pincelamos con mantequilla derretida y espolvoreamos azúcar.
Rico, rico!!!
FUENTE: "la cocina de Frabisa"