Para empezar, qué mejor que con el pan, un delicioso pan de pita casero para acompañar a los platos de nuestro menú griego.
Su nombre deriva del griego que significa pastel o pan. El pan de pita es un tipo de pan redondo y plano cuyo origen se atribuye a Oriente Medio, especialmente a Egipto y con raíces también en Grecia, la India y África.
Se utiliza de diferentes maneras, por ejemplo, en África se utiliza como tenedor para llevarse la comida a la boca mientras que en el Mediterráneo se utiliza como plato, en el que se sirve la comida, pero su popularidad llegó en forma de pan hueco para rellenar.
Como nota interesante, comentaros que en Bulgaria se come en ocasiones especiales como Nochebuena y en las ceremonias de las bodas se entrega a los novios acompañado de miel y sal como símbolo de igualdad y dulzura de la vida de casados.
Bueno, vamos con mi versión de la receta del libro Taking You Home de las gemelas Helena y Vikki.
Ingredientes para 10 pitas:
500 g de harina de fuerza
500 g de yogur griego
1 cucharada de levadura
1 cucharada de sal
aceite de oliva virgen extra
Como ya sabéis, en mi recetas evito la lactosa y para ello he sustituido el yogur griego por uno cremoso sin lactosa.
Como levadura he usado dos sobres de levadura de panadería de 5,5 g cada uno.
Para el aceite es mejor tenerlo en spray aunque también puedes usar una brocha para extender el aceite por la sartén y el pan.
Preparación:
Como siempre preparamos los ingredientes y utensilios que vamos a necesitar. Lo mejor es sacar el yogur lo último porque cuanto más frío, mejor nos saldrá la masa.
Introducimos en un bol todos los ingredientes, es decir, la harina, la levadura, la sal y el yogur y mezclamos con la ayuda de una cuchara de madera hasta que se forme una masa. O podemos utilizar un procesador de alimentos que es mucho más rápido y no necesitamos amasar tanto.
Si vemos que la mezcla es muy seca le podemos añadir agua y en caso de que la masa sea demasiado húmeda le añadiremos más harina.
Espolvoreamos un poco de harina sobre nuestra superficie de trabajo, colocamos la mezcla, amasamos durante 1 minuto y dividimos la masa en 10 partes iguales.
Nos echamos harina sobre la superficie de trabajo, el rodillo y nuestras manos. A continuación cogemos una de las porciones de masa, formamos una bola y la aplastamos sobre nuestra superficie de trabajo y extendemos la masa con la ayuda del rodillo.
Colocamos una sartén a fuego medio y la rociamos con aceite de oliva virgen extra, colocamos una de las pitas y volvemos a rociar con aceite la cara vista del pan. Cocinamos durante 2 minutos por cada lado. Repetimos este proceso con el resto de las pitas.
Presentación:
Servimos calientes aunque podemos comerlas al día siguiente que saben mejor. Si es así, las calentaremos en el horno o las freiremos a fuego medio durante un par de minutos.
Las podemos servir enteras o partidas en cuartos colocándolas en unas cestas que pondremos en el centro de la mesa para que cada comensal coja lo que quiera.
Bon appétit!!!