Hoy es uno de esos días que tengo la cabeza de adorno :)
Cuando me puse a hacer las fotos de estos panes se me olvidó por completo hacer una del pan entero. Y me di cuenta cuando era demasiado tarde y ya no había testigos.
Así que solo nos queda el documento gráfico de la miga de este bollo tan tierno que fue la compañia perfecta de las hamburguesas de berenjena.
La receta la vi en Canecositas.
Voy a destiempo con esta receta pues se preparan en enero para celebrar el santo del patrón de los animales. Quizá ese día vuelva a hacerlos en homenaje a mi fauna.
INGREDIENTES:
Harina de trigo: 400 gramos.
Agua: 200 mililitros.
Aceite de oliva: 50 mililitros.
Sal: 10 gramos.
Masa madre: 100 gramos*.
*Podemos sustituirla por 8 gramos de levadura fresca o 2´66 gramos de levadura seca.
ELABORACIÓN:
En un bol mezclamos el agua y la harina y dejamos que repose tapado durante media hora.
Añadimos el resto de los ingredientes y amasamos con reposos; esto es, amasado de unos 5 minutos y reposo de 10 minutos. Este proceso debemos repetirlo hasta que la masa esté lisa, sin grumos.
Pasamos la masa a un bol con aceite y tapamos con papel film.
Cada media hora plegaremos la masa sobre sí misma, repitiendo estos plegados en tres ocasiones:
Reposo de 30 minutos - Plegado - Reposo de 30 minutos - Plegado - Reposo de 30 minutos - Plegado.
Después del último plegado tapamos la masa y dejamos que fermente, a temperatura ambiente o en nevera.
Cuando la masa haya subido la volcamos sobre la superficie de trabajo, la desgasificamos y cortamos las porciones que van a ser cada bollo.
Preformamos cada bollo y dejamos que reposen durante media hora.
Pasado este tiempo damos forma a los bollos.
Encendemos el horno a 200ºC.
Cuando el pan esté listo para ser horneado dibujamos una cruz en la superficie, con un cutter o con un cuchillo muy afilado.
Los metemos en el horno y cocinamos durante 25 minutos. Los sacamos del horno y los dejamos enfriar sobre una rejilla.