A las puertas del fin de semana os traigo un pequeña y dulce bombita, panna cotta de dulce leche nada más y nada menos para endulzar el día y preparar estos días. Oye, que un postre rico y dulzón de vez en cuando no viene mal. Además suponemos que no nos lo vamos a comer nosotros todo, sino que lo vamos a compartir, con lo cual menos culpa. Yo lo que quería era compartir el dulce de leche porque últimamente me estoy aficionando a mezclarlo con el yogur natural y no es plan.
La panna cotta se puede hacer de tantos sabores como queramos (aquí tenéis otra idea y otra con fruta) y algo más ligera si añadimos leche o usamos una nata (crema de leche) con menos materia grasa, pero ya que me ponía... La idea de utilizar el dulce de leche Chimbote se me ocurrió al ver el bote en mi última caja Degustabox, sí queréis también recibirla vosotr@s en vuestra casa con este código FRUWM os costará 9,99 (gastos de envío incluidos) en vez de 14,99.
La receta es simplona, rápida y resultona, un 3 en 1 para acabar una comida estupendamente. ¡Dentro receta!
INGREDIENTES
(para 8 raciones)
500ml de nata (crema de leche) 35% materia grasa.
4 cucharadas de dulce de leche Chimbote
3 hojas de gelatina neutra
ELABORACIÓN
Hidratamos las hojas de gelatina durante 7 minutos en un bol con agua fría.
En un cazo calentamos la nata (crema de leche) y el dulce de leche a fuego lento y mezclamos bien.
Escurrimos las hojas de gelatina y las incorporamos a la mezcla de nata (crema de leche), incorporamos bien y vertemos el líquido en los moldes o vasitos que vayamos a utilizar.
Refrigeramos un par de horas.
Feliz fin de semana,