Esta pasta que les comparto hoy es verdaderamente deliciosa y muy fácil de preparar; lleva muy pocos ingredientes, pero a pesar de ello está llena de sabor y texturas. Realmente para chuparse los dedos.
Les cuento que la autoría de esta delicia no es mía, si no de un par de hermanos cocineros profesionales a quienes sigo y admiro un montón. Los hermanos Petersen, Christian Petersen y Roberto Petersen, dos cocineros argentinos con maravillosas recetas. Soy muy fan de sus programas y esta receta la vi en uno de los capítulos y la gravé en la mente; por que les confieso que no la anoté, así que cuando la repliqué, lo hice siguiendo lo que había almacenado en mi disco duro mental…. probablemente se me escapó algún detalle o ingrediente, pero así como la hice está del mas allá.
INGREDIENTES para 2 personas:
2 raciones de pasta corta integral
1 brócoli pequeño
12 champiñones
un buen manojo de perejil muy fresco (bastante)
2 dientes de ajo grandes
3 cucharadas de aceite
sal y pimienta negra recién molida.
queso tipo ricotta al gusto
PREPARACIÓN:
Limpiar con un pañito los champiñones y cortarlos en láminas. Picar los ajos muy finamente y el perejil. En una sartén grande a fuego bajo colocar 2 cdas de aceite e incorporar los ajos; cuando estén brillantes y saltando agregar los champiñones y un poco de pimienta negra. Saltear los hongos y cuando comiencen a ablandar, incorporar el perejil. Terminar de saltear todo junto un minuto mas y apagar el fuego. Salar los champiñones una vez cocidos para que así no suelten toda el agua y no se reduzcan tanto de tamaño.
En una olla con agua hirviendo con sal gruesa, cocinar la pasta. Cuando la pasta lleve aproximadamente unos 4 minutos, incorporar los arbolitos de brócoli ya limpios y picados. Cocinar todo junto hasta que la pasta esté al dente.
Con ayuda de una espumadera ir pasando la pasta y los brócolis a la sarten de los champiñones; agregar un poquito del agua de cocción, llevar a fuego medio y saltear todo junto por 1 minuto incorporando la cucharada de aceite restante. Rectificar el punto de sal y pimienta.
Servir y una vez en el plato, agregar queso ricotta al gusto.
Fuente: este post proviene de Mariana Martínez. Cocina y Casa, donde puedes consultar el contenido original.
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