Con esta receta participo en el Reto de primavera de Recetario Mañoso, en esta ocasión me he decantado por el puerro.
Del puerro os puedo contar, que es una buena alternativa culinaria al ajo y la cebolla, ya que posee propiedades parecidas, aunque su sabor es más suave. Se pueden consumir crudos en ensalada, aunque lo mas usual es tomarlos hervidos o rehogados.
Ingredientes:
Un paquete de masa quebrada
40 gr de mantequilla
500 gr de puerros limpios y cortados en rodajas
250 gr de bacón cortado en tiras pequeñas
una cucharada y media de harina
una cucharadita de pimentón dulce
una cucharadita de zumo de limón
un vaso de leche
3 huevos batidos
sal y pimienta
Preparación:
Calentar el horno a 200 grados.
Forrar un molde con la pasta quebrada, pinchar el fondo con un tenedor. Cubrirlo con un círculo de papel para horno, rellenarlo con garbanzos crudos y cocerlo en el horno durante 10 minutos. retirar los garbanzos y el papel, volver a introducirlo en el horno hasta que esté ligeramente dorado.
Mientras tanto preparamos el relleno: Fundir la mantequilla en una sartén o cazuela, añadir los puerros, salpimentar, tapar y rehogar durante 10-15 minutos hasta que estén blandos.
En otra sartén freímos el bacón en su propia grasa hasta que esté dorado y reservamos. Cuando los puerros estén blandos, echar la harina y el pimentón, rehogarlo durante 1 o 2 minutos, sin dejar de mover. Añadir el zumo de limón y la leche, dejándolo que hierva y moviéndolo continuamente. Separar la sartén del fuego y añadir los huevos batidos, mezclamos bien.
Como la pasta ya estará horneada, bajamos la temperatura del horno a 180 grados, extendemos los trozos de bacón sobre la base, echando encima la mezcla de los puerros. Volver al horno y cocer durante 20 o 25 minutos más.
Servir templado.