Hace unos dias hablaba con mi amiga Marisol de este plato.
Me comentaba lo mucho que le gustaba y que le gustaría hacerlo en casa. Yo le busqué una receta para hacerlo a la manera tradicional, pues ella no tiene thermomix. La receta que le busqué fue esta.
Cuando me enseñó la foto de su pastela me entró el gusanillo de hacerla jajaja. No la tenía en el blog y es un plato muy rico que merece la pena preparar.
Como sabréis, la pastela es un plato de origen marroquí, cargado de especias y de sabor que combina divinamente lo dulce y lo salado.
Yo quería hacer el relleno con thermomix, encontré una receta para hacerlo todo en el blog de una presentadora y me puse a ello.
He cambiado algunas cantidades y tiempos. He añadido ingredientes nuevos y he quitado otros, pero en esencia es lo mismo.
El resultado es un plato buenísimo con una mezcla de sabores y olores que os encantará.
Os dejo la receta tal cual yo la hice y con los cambios que introduje.
INGREDIENTES:
10 hojas de pasta filo
50 gr de mantequilla fundida (podemos usar aceite en su lugar)
Azúcar glass y canela para espolvorear y adornar
Para el relleno:
300 gr de pechuga de pollo
1 cebolla
45 gr de aceite de oliva
50 gr de almendras tostadas (yo las tuesto en el horno, pero podemos freirlas igualmente)
100 ml de caldo de pollo (podemos usar agua)
Unas hojas de cilantro picadas
1/2 cucharada de canela molida
1/2 cucharada de jengibre molido
1/2 cucharada de comino molido
1/2 cucharada de cúrcuma
1/2 cucharadita de azafrán
1 cucharadita de sal
1 pellizco de pimienta blanca
25 gr de piñones
25 gr de pasas
25 gr de ciruelas pasas troceadas
40 gr de azúcar moreno
2 huevos
PREPARACIÓN:
Primero vamos a tostar la almendras en el horno, diez minutos a 180º. Si lo preferimos, podemos freirlas. Sea como sea, las dejamos enfriar y después las picamos 2 segundos a velocidad 6. Las reservamos.
Cortamos la pechuga en trozos y la echamos en el vaso de la thermomix. Vamos a picarla 1 segundo a velocidad 8. La reservamos también.
Ahora vamos con la cebolla, la cortamos en cuartos y la picamos 4 segundos a velocidad 4. Añadimos el aceite y sofreímos 7 minutos, varoma y velocidad 1.
Añadimos el pollo y las almendras que teníamos reservados, más el cilantro, y todas las especias. Programamos 25 minutos, 90º, velocidad 2 y giro a la izquierda.
Al acabar, agregamos los piñones, pasas, ciruelas troceadas, azúcar y los huevos ligeramente batidos y cocinamos 3 minutos, 90º, velocidad 2 y giro a la izquierda.
Sacamos el relleno y lo dejamos enfriar en un recipiente. Luego lo guardamos en la nevera unas tres horas.
Pasado el tiempo, precalentamos el horno a 180º. Sacamos las hojas de pasta filo y las pintamos con la mantequilla que habremos fundido en el microondas.
Vamos poniendo las hojas de pasta filo en un molde redondo, esto nos servirá para dar forma a la pastela. Dejamos que la pasta filo sobresalgan del molde. Ponemos el relleno en el centro y vamos cerrando las hojas de pasta filo hacia el centro. No olvidéis pincelar con la mantequilla cada hoja. Horneamos hasta que la veamos dorada.
Al sacarla del horno, dejamos sobre una rejilla unos minutos antes de adornar con azúcar glass. La echamos a través de un colador y también podemos adornar con canela.
Con estas cantidades me salieron dos pastelas, una más grande y otra mediana.
Ponemos las almendras crudas en una bandeja de horno y las tostamos ligeramente.
Dejamos que se enfríen.
Y las ponemos en el vaso para picarlas. Las reservamos.
Sin lavar el vaso, ponemos el pollo en trozos grandes y lo picamos. Reservamos.
Seguimos sin lavar el vaso, echamos la cebolla en cuartos.
La picamos. Añadimos el aceite y sofreímos.
Agregamos el pollo, el caldo y las almendras
Más el cilantro picado y las especias. Lo cocinamos.
Agregamos el azúcar, los piñones, las pasas y las ciruelas troceadas.
Echamos los dos huevos batidos ligeramente y cocinamos.
Dejamos el relleno en un recipiente que enfríe y lo guardamos en la nevera al menos tres horas.
Vamos poniendo capas de pasta filo pincelando cada capa con mantequilla fundida. Yo puse seis capas en la pastela grande.
Ponemos el relleno dentro.
Ahora vamos cerrando hacia dentro las capas de pasta filo, engrasándolas con la mantequilla fundida. Horneamos hasta que esté dorada.
Al sacarla del horno adornamos con azúcar glass y canela.
¡Que buenas! Si os gustan los contraste de sabores, esta receta es perfecta.