Hoy preparamos patatas bravas, todo un clásico del tapeo español, que nosotros cocinaremos en casa. Además, la receta viene con trucazo para conseguir unas patatas con una textura bien tierna en su interior y extra crujiente en su exterior.
El secreto, como te explico en la elaboración, está en el cocinado de las patatas, que haremos en dos tiempos, lo que asegura una textura riquísima y, además, favorece que las patatas no absorban tanta grasa en su fritura.
El resultado es un bocado exquisito, aunque tratándose de unas típicas bravas españolas, no podía ser de otra manera.
INGREDIENTES para hacer patatas bravas
1 kg de patatas2 dientes de ajo
media cebolla
30 ml de aceite para la salsa
15 gr de harina
pimentón dulce y picante
caldo de pollo (400 ml aprox.)
sal
agua
aceite para freír
Vídeo con la receta
Como hacer patatas bravas: paso a paso de la elaboración
1. Precocer las patatas
Para empezar, pondremos al fuego una cazuela con abundante agua y sal al gusto. Cuando comience la ebullición, añadiremos las patatas, peladas, lavadas y cortadas en trozos de bocado.Les vamos a dar un ligero hervor, con esto conseguiremos esa una textura diferente de la que te hablaba. El tiempo de cocción será de unos 5 minutos, aunque dependerá un poco de la patata que utilicemos. Pero eso si, siempre hay que sacar las patatas antes de que se rompan o estén excesivamente tiernas.
Tras esta pequeña cocción , las colocaremos sobre un paño de cocina extendidas, las secaremos bien y, tapadas, dejaremos que se enfríen un poco.
2. Preparar la salsa brava
Ponemos a calentar 30 ml de aceite. Cuando adquiera temperatura, incorporamos los dientes de ajo sin piel y troceados y dejamos al fuego un par de minutos, hasta que veamos que empiezan a tomar color. En este punto agregaremos media cebolla picada y una pizca de sal, y ahora, a fuego suave, mantenemos el cocinado hasta que la cebolla esté tierna.Añadimos a la cazuela la harina y una mezcla de pimentón dulce y picante. Yo suelo poner media cucharada de pimentón picante y una cucharada del dulce, pero no dudes en adaptar estas cantidades para dejar la salsa brava en el punto que más te guste.
De nuevo a fuego suave cocinamos todo junto durante un par de minutos, con mucho cuidado de que no se tuesten ni la harina ni el pimentón.
Y para acabar la salsa nos faltará solamente incorporar un caldo, que puede ser de carne o de pollo. Iremos añadiéndolo de poco en poco, moviendo y cocinando, de la misma forma que haríamos con una bechamel.
La cantidad de líquido, la que nos pida la mezcla, normalmente suele ser alrededor de unos 400 ml aproximadamente. En cuanto la salsa haya espesado, la retiraremos del fuego.
Trituramos la salsa hasta dejarla bien fina. Aquí, además, comprobamos el punto de sabor y la consistencia final por si hubiera que rectificarlos.
Reservaremos la salsa, tapada, mientras terminamos de cocinar las patatas.
3. Freír las patatas
Llevamos al fuego una sartén con abundante aceite. Cuando esté muy caliente, pero no humeante, echamos las patatas. Enseguida bajamos el fuego y dejamos que las patatas se vayan friendo poco a poco, que queden bien hechas por dentro.Cuando las tengamos prácticamente listas subreinos de nuevo el calor y le daremos unos minutitos más de cocinado, de esta forma conseguiremos ese rico toque crujiente por fuera.
Y tras sacarlas de la sartén, las escurriremos en papel absorbente.
4. Servir las patatas bravas
Emplatamos enseguida, para servir las patatas bien calientes y, como no, acompañadas de su salsa.Resumen de la receta
Patatas bravas, con trucazo para dejarlas en su punto
En esta receta de patatas bravas te explico como cocinarlas para que te queden tiernas por dentro y con un exterior crujiente.
Ingredientes
1 Kg de patatas2 dientes de ajo
media cebolla
30 ml de aceite para la salsa
15 gr de harina
pimentón dulce y picante
400 ml de caldo de pollo
sal
agua
aceite para freír
Elaboración paso a paso
Precocer las patatas: cocinarlas en agua con sal durante 5 minutos. Sacar y secar muy bien.Preparar la salsa brava: sofreír ajos y cebolla. Añadir harina, pimentón y caldo y cocinar hasta que espese. Pasar la salsa por la trituradora.
Freír las patatas: en aceite bien caliente, primero a fuego suave y luego a máxima temperatura.
Servir en caliente.
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