En estos días que uno no está saliendo mucho de casa creo que la constante es que se nos antoje cocinar algo para la tarde o para la merienda, ya que contamos con un poco más de tiempo, y si al salir te topas con un poco de masa de hojaldre más ideas se vienen a la cabeza
Estuve varios días pensando qué hacer con ella y no me decidía, hasta que el día de hoy pensé nuevamente en la masa y siempre tengo manzanas al centro de la mesa, pues es una pequeña trampita que le tiendo a mi familia para que coman un poco más de fruta, y quién le dice que no a una apetitosa manzana?
Pues hoy me sucedió eso! De pronto le presté atención a las manzanas que estaban en el centro de la mesa de la cocina y automáticamente pensé en la masa de hojaldre y tomé mi decisión definitivamente sería un Pay de manzana, pero también tenía un pequeño recipiente con unas nueces que había utilizado en una receta previa y pues se me antojó añadirlas, y después pensé: y qué más le podré añadir para que no sean solamente manzanas y nueces? Y así un pensamiento me llevó a otro y fui armando la receta que les comparto
A veces así es la cocina, no tienes una idea o un antojo determinado, y vas dándole forma al platillo con lo que tienes a la mano o a veces inventando pues hoy éste fue el resultado y he de decirles que hace muy poco tiempo terminé de preparar este delicioso pay y ya se está terminando!! En ocasiones se tarda uno más en preparar que en lo que se disfruta y no queda más que el sabor en las papilas gustativas y una que otra migaja en algún plato así es en casa
Ingredientes:
Masa de hojaldre dos círculos
1 huevo para barnizar
Azúcar para espolvorear
Relleno:
6 manzanas picadas en cubos
1 limón, el jugo
50 gramos de pasas de uva
5 cucharadas de Ron
6 cucharadas de azúcar
1 cucharadita de vainilla
2 cucharadas de mantequilla
¾ Taza de nuez picada
Canela en polvo al gusto (opcional)
2 cucharadas de pan molido Procedimiento:
Comenzamos colocando las pasas en un recipiente de vidrio y las bañamos con el ron, puedes dejarlos toda la noche o toda la mañana, eso será mejor, hoy yo no tuve tiempo y las bañé y después las coloqué en el micro unos 30 segundos, sólo para que el vino se calentara un poco, sin que se evaporara el alcohol. Hecho esto, las reservamos.
Por otra parte, fundimos la mantequilla en una sartén, añadimos las manzanas picadas y el jugo de limón, esto será para que no se oxiden, puedes añadirle el limón al picarlas.
Le agregamos el azúcar, la vainilla, la canela si lo decides, pues en realidad no lleva la receta tradicional, pero a mí me encanta el sabor que le da.
Añadimos las pasas que pusimos con el ron, pero sólo las pasas, pues éstas ya tendrán el delicioso sabor envinado, no coloco el líquido pues sería excesivo para el relleno y se perdería al resto de los sabores al quedar muy envinado.
Es momento de agregar las nueces, el pan molido (le dará cuerpo al relleno) y mezclar todo.
Apagamos el fuego y dejamos que se enfríe este delicioso relleno, me gusta que no quede tan dulce y es mejor si las manzanas están un poquito aciditas, pues eso le dará un sabor extraordinario y resaltarán de pronto.
Es momento de precalentar el horno a 175 grados.
Por otra parte, extendemos la masa de hojaldre y con ella forramos un molde para pay, o bien, puedes realizar el tradicional rollo o trenza, pero hoy se me antojó prepararla como si fuera un pay.
Debemos hacerle unos pequeños hoyitos a la masa sobre el molde para que no se infle y no nos quede bonita al momento de hornear.
Recuerda no manipular tanto la masa de hojaldre, para que no se caliente y quede bien al hornear, y lo mejor será al colocarla en el molde guardarla unos 10 minutos en el refrigerador para que vuelva a enfriarse, así se cocinará de la manera adecuada, quedará crujiente y deliciosa.
Mientras se está enfriando el relleno.
Cuando haya pasado el tiempo para que la masa se enfríe y el relleno ya está frío, lo colocamos sobre la masa y encima el otro círculo de masa, no olvidemos hacerle un pequeño orificio al centro para que se salga el calor, otra opción será cortar tiritas de masa y con ellas hacer un enrejado encima.
Si notas que manipulaste mucho la cubierta y la masa se calentó o se suavizó mucho, fórmala completamente y vuelve a refrigerar unos 10 minutos para que vuelva a enfriarse.
Cuando está otra vez fría y un poco más rígida, la podemos barnizar con el huevo batido, a mí me gusta además espolvorearle un poco de azúcar encima y eso le dará un efecto muy bonito, como cristalizado y se verá apetitosa, o bien, puedes sólo ponerle el huevo y al servir espolvorear un poco de azúcar glass
Es momento de hornearla a 175 grados hasta que notes que ya está doradita. Tal vez unos 50 minutos, dependiendo el horno, de cualquier manera no la descuides, cada horno es distinto y cada molde.
Pasado este tiempo no queda más que disfrutarla, puedes servirla con una rica bola de helado de vainilla o de rompope, eso le queda muy bien, o así solita en verdad la disfrutarás!!