Buenos días, ¿qué tal ha ido la semana?
Nosotros por Lanzarote muertos de calor, cada vez me doy más cuenta de que yo soy del norte. Tanto calor me pone de mal humor y tampoco ayuda el hecho de volver a casa de tus padres cuando llevas cinco años viviendo sola. Aunque sea sólo para un mes y pico se hace muy extraño.
Es una situación un poco rara porque yo a Lanzarote nunca lo he considerado mi casa, siempre he dicho que iba a casa de mis padres aunque tenga aquí muchas cosas y al fin y al cabo sólo viví en la isla dos años. Tampoco siento Barcelona mi casa, aunque haya vivido allí cinco años, supongo que el hecho de estar siempre cambiando de piso no ha ayudado. Aunque hace ocho años que me fui de Vitoria yo me sigo sintiendo vitoriana aunque allí ya no tenga mi casa, bueno sí tengo pero como vive allí mi hermana con su novio ya tampoco la siento mía. Así que estoy en un momento un poco raro aunque supongo que a todos los que terminan los estudios les pasará algo parecido y más si has estudiado fuera.
Tanto tiempo libre no ayuda nada así que mejor sigo horneando para traeros recetas nuevas como esta que os traigo hoy. Mi padre trabaja con una chica que es de la isla de toda la vida, toda su familia es de aquí y le suele dar productos de su huerto. El año pasado le dio unos higos con los que mi madre hizo mermelada y hace unos días le dio una bolsa de pasas. Así que decidí hacer un Plum Cake ya que nunca lo había preparado y así voy adentrándome en la repostería inglesa antes de mudarme a Londres. Al final no he hecho la receta clásica, todas las que veía llevaban demasiada mantequilla y quería algo más ligero. Investigando me decidí por adaptar esta receta de Directo al Paladar.
El Plum Cake es un bizcocho denso con fruta como pasas, ciruelas o fruta confitada aunque en la actualidad se llama plum cake a los bizcochos que se hacen en un molde largo.
Ingredientes
140 g de pasas
1 cuenco de té (Yo usé una mezcla de roibos con naranja de Teterum)
100 g de azúcar moreno
1 huevo
150 ml de leche (Yo utilicé sin lactosa)
175 g de harina de arroz
75 g de maizena
2 cucharaditas de levadura
1 pizca de sal
1 cucharadita de canela
1 pizca de nuez moscada
Preparamos el té y dejamos infusionar las pasas mínimo 1 hora.
Precalentamos el horno a 175º
Mezclamos las pasas con el azúcar.
Añadimos el huevo y batimos con cuidado.
Incorporamos la harina, la levadura, la sal y las especias.
Vertemos la leche y revolvemos hasta que esté bien integrada.
Repartimos la masa en un molde previamente engrasado y espolvoreamos un poco de azúcar moreno por encima.
Horneamos unos 45-50 minutos.
Tengo que decir que esta es la primera receta que pongo en el blog que no he probado personalmente, pero es que no puedo con las pasas, no me gusta ni su sabor ni su textura. Pero os puedo asegurar que por la velocidad por la que se lo comieron mis padres que estaba bueno.
Feliz semana :)
Fuente: este post proviene de Repostería Tximeleta, donde puedes consultar el contenido original.
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