Cuantas veces os habéis preguntado ¿De qué forma podemos preparar la pechuga del pollo para no aburrirnos de comerla siempre igual? Pues yo por lo menos muchas veces, así que siempre estoy pensando recetas diferentes para que al cocinarla además de rica quede jugosa. Esta receta que os propongo hoy es una forma sencilla de prepararla, y el resultado es estupendo porque queda muy rica.
Como macerar la pechuga:
Cortar la pechuga a trozos (tiene que ser entera).
Echar en un bol la pechuga salpimentada, la leche y las hierbas (pueden ser otras de vuestra elección).
Dejar macerar tapado en la nevera unas dos horas mínimo.
Preparar una tempura con la harina especial, la leche sobrante del macerado, el agua muy fría y el pimentón (puede ser dulce o picante).
Envolver los trozos de pechuga ya macerada.
Freir en abundante aceite de oliva virgen extra hasta que esté dorado.
Sacar sobre papel absorbente.
La harina de tempura es una harina especial para estas preparaciones, además en el paquete nos indica como prepararla.
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