Hoy vengo con una receta especial, dedicada a dos chicas que han cambiado el mundo bundt cake en España desde que abrieron su blog hace un año. Desde aquí les felicito ya que hacen un trabajo increíble. Con motivo de su primer aniversario han organizado un fantástico concurso. Pinchando en la foto a continuación veréis mas detalles sobre el. Os invito que las visitéis si aun no lo habéis echo.
La verdad es que la vida en casa nos ha cambiado muchísimo desde que mi hijo supero su alergia al huevo. Muy a menudo me acuerdo de los inicios del blog inspirados en las recetas sin huevo para ayudar a otros padres a modificar las recetas de toda la vida e adaptarlas para los alérgicos al huevo y sus familias. Una de estas recetas que tanto gusto en su día y tengo pendiente de repetir pero con huevo es la que os traigo hoy. A parte de las bolitas de coco tenemos un esponjosísimo y rico bizcocho de yogur bicolor. Lo he llamado pound cake ya que era lo mas parecido a lo que llega a ser un pound cake pero para mi siguen siendo un "pastel con sorpresa" "modificado". Si lo hacemos en molde rectangular conseguiríamos el mismo efecto que el original. Ingredientes: (intentando que todos sean a temperatura ambiental)
7 huevos de gallinas felices (gracias a mi familia por ellos)
1 yogurt natural
media cucharadita de bicarbonato sódico
120ml de aceite de girasol
300g de azúcar
300g de harina floja
1 sobre de levadura química (tipo Royal)
esencia de vainilla a gusto
dos cucharadas colmadas de cacao puro
Para las bolitas de coco:
100gr de queso crema
100gr de coco rayado
50gr de azúcar
Empezamos haciendo las bolitas de coco. Mezclamos el coco, el queso crema y el azúcar bien hasta conseguir una masa homogénea. Hacemos bolitas del mismo tamaño y las congelamos. Yo he usado una bolsa de congelación intentando no apilarlas.
"Apagamos" el bicarbonato sódico en el yogurt. Mesclamos bien y dejamos un par de minutos que actúe hasta que salgan burbujitas. Tener en cuenta que si lo hacéis en el mismo recipiente del yogurt rebozara del recipiente. Batimos los huevos con el azúcar y la esencia de vainilla hasta que tripliquen su volumen. A continuación sin dejar de batir añadimos el aceite. Incorporamos el yogur con movimientos envolventes y por ultimo la harina previamente tamizada con la levadura (guardaremos dos cucharadas colmadas) hasta su total absorción. Separamos la masa en dos partes. A una de ellas añadimos el cacao puro y a la otra las dos cucharadas de harina sobrantes. Engrasamos un molde para bizcochos (el mío es bastante grande de allí los 7 huevos) y volcamos la masa de cacao. A continuación hacemos lo mismo con la masa clara y colocamos las bolitas de coco aun congeladas como mas nos guste. En la versión original se consigue este efecto de "olas" que en un molde tan hondo se pierde. Horneamos unos 45-50min a 170º en el horno precalentado. De todas formas el tiempo dependerá del horno de cada uno. Ya sabéis que la mejor forma de comprobar que no sigue crudo por dentro es pinchando con un palito de madera. Si este sale limpio podemos sacar nuestro bizcocho del horno. Nunca abráis el horno los primeros 20min de horneado ya que vamos a perder calor y nuestro bizcocho se bajara.
Una vez tibio desmoldamos y dejamos que enfriar sobre una rejilla antes de cortar y degustar.
Dedico esta receta a todas estas mamas que a diario se enfrentan a la monotonía que provoca una alergia alimenticia. Os animo a intentar a combatir el miedo y experimentar para sacarles una sonrisa a nuestros niños y adaptar las recetas "imposibles" y sobre todo os deseo poder tener la misma suerte que nosotros y poder dejar estos problemas detrás. Un besazo y os espero en Facebook como siempre.