Aprende cómo cocinar la Soja Texturizada con una revisión a fondo de qué es este nuevo formato de alimento rico en proteínas.
La Soja Texturizada sale a buen precio, ya que el paquete de 250 Gr. cuesta sobre 1,50 Eur.
Es un producto que tiene un 50% de proteína y un 30% de Hidratos de Carbono. No contiene azúcares y es muy bajo en grasas saturadas, siendo 100% Soja Texturizada.
En este vídeo te explico muy bien todos sus secretos:
¿Para quien está indicado este producto?
Principalmente para aquellas personas que sean vegetarianas y que necesiten un gran aporte de proteínas, esta solución de formato de soja le puede venir muy bien.
Para aquellos que quieren complementar sus dietas añadiéndole más proteínas pero que sean de origen vegetal o sencillamente tienen una dieta alta proteica y quieren reducir la toma de carne, pues éste es un buen alimento para añadir en su día a día.
También, por qué no?, aunque no seas vegetariano, si simplemente tienes curiosidad por experimentar con recetas veganas, este puede ser tu producto estrella.
¿Cómo se suele comercializar la Soja Texturizada?
En sitio especializados la venden en diferentes tamaños: Fina, Gruesa, en Filetes, en Cortezas, en Bolitas o Tiras y además la suelen tener tanto de color claro u oscuro.
La soja texturizada fina que es la que venden en Mercadona, es la que encontramos en trocitos más pequeños, de unos 5 mm, en bolsas o paquetes que parecen de cereales.
Si lo miramos de cerca vemos que son trocitos pequeños e irregulares de aspecto fibroso y esponjoso, aunque secos.
Hay a quien le gusta comerla tal cual, con yogur por ejemplo, porque su sabor es muy suave y su textura crujiente, pero lo normal es hidratarla y dorarla o mezclarla con salsa.
La soja texturizada fina no apelmaza, es decir, no podemos aglomerarla tal cual, los trocitos no se pegan entre sí, por lo que no podemos hacer hamburguesas o albóndigas con la soja tal cual, sino que debemos mezclarlo con harina u otros aglomerantes
¿Cómo se usa?
Lo principal es la Hidratación
Como la soja texturizada viene seca y deshidratada, tenemos que someterla a un proceso de hidratación que la ablande, la haga crecer y adquiera una textura agradable al masticar. Lo mejor para hidratarla es utilizar agua y/o líquidos ligeros o salsas muy líquidas, de forma que pueda absorber muy bien toda la humedad necesaria.
Algunos trucos para usarla adecuadamente:
Utiliza agua caliente en lugar de fría, se hidratará mucho antes. En agua fría puede tardar entre 10 y 30 minutos, dependiendo del tamaño de los trozos (10 minutos para la soja texturizada fina), mientras que en agua caliente reducimos a la mitad el tiempo requerido.
Se puede hervir en lugar de remojar, acelerará mucho más el proceso y nos dejará una soja texturizada precocida con una mejor textura de cara a su posterior preparación. Al cocerla hasta que quede blanda mejoraremos su textura, que será más jugosa y fibrosa que esponjosa, ya que no sólo proporcionamos agua, sino también calor, que cocinará un poco la soja y quedará más carnosa por dentro.
Ten en cuenta que la soja texturizada duplica su tamaño al hidratarla. Aunque te parezcan trozos pequeños, puede que después de hidratados sean una cantidad excesiva para el plato que quieres preparar. No te preocupes, lo puedes guardar en un táper bien cerrado, en la nevera, hasta 3 días.
Necesitarás algo más del doble de agua que de soja texturizada, y un poco más si vas a hervirla (entre el agua que absorbe y el que se evapora puede quedarte alguna parte un poco más dura si no hay suficiente agua.
Puedes escurrir el exceso de agua, pero no la estrujes como si fuese una esponja (salvo que sea necesario para la receta que vayas a hacer), porque expulsará demasiada agua y al cocinarla se nos quedará algo seca y vacía por dentro, además de que con el calor de la cocción, sobre todo si la vas a hacer frita o a la plancha, se irá encogiendo.
Se puede añadir salsa de soja, caldo de verduras y especias al agua en el que la hidratemos o la pongamos a hervir. De hecho es recomendable si queremos que tenga un buen sabor. Si usas caldos o salsas procura que sean ligeros, ya que si no la soja texturizada no absorberá bien el agua y quedará dura.
Ejemplo de cómo usarla como si fuera carne picada
Para hacer esta soja texturizada fina la vamos a hidratar en agua caliente con tomillo, perejil y salsa de soja.
En pocos minutos empieza a hincharse absorbiendo el agua, la salsa de soja y el sabor de las especias. Podemos removerlo de vez en cuando para que el sabor quede más homogéneo. Una vez hidratada escurrimos el exceso de agua si lo hubiese, calentamos 1-2 cucharadas de aceite en una sartén pequeña o mediana y doramos la soja texturizada unos minutos. Se pueden añadir más especias y salsas mientras se dora.
Y el resultado es una soja texturizada doradita y suelta, que podemos utilizar como si fuese carne picada, por ejemplo, con un plato de pasta, como relleno para canelones o lasaña, para una pizza, etc. También se puede dorar un poquito más y añadir salsa de tomate. Se puede agregar un poquito más de salsa de soja si lo queremos con más sabor, otras especias, cebolla u otras hortalizas picadas, etc.