Aves, pescados y mariscos
Durante estas fiestas, el pavo o el pollo relleno serán protagonistas. Este tipo de carnes van bien, tanto con vinos tintos y blancos, y hasta rosados. En caso de elegir vinos tintos, mejor hacerlo con jóvenes, pero con cuerpo. Mientras que si elegimos pescados y mariscos para la Nochebuena, es mejor escoger vinos blancos, de DO Albariño, un vino bien definido con cuerpo y que siempre queda perfecto en todas las mesas, tanto para recibir a invitados como para ir a casa de otros.
Otras DO de blancos que aconsejamos para las comidas de Navidad con pescados, son los blancos verdejos y los de Rueda. Además de probar algunas de las nuevas DO, de vinos algo más jóvenes, como los de Alicante o de Canarias.
Para las carnes de ternera, cerdo o cordero
Una vez hemos tomado los mariscos, en muchas casas se pasará directamente a la carne. Con el cordero al horno, el cerdo relleno o bien el solomillo de ternera con guarnición, nada mejor que los vinos tintos, y si son de crianza, mucho mejor. Los vinos llamados de invierno pueden ofrecernos soluciones para estas fiestas. Pues suelen tener mucha más consistencia, cuerpo, sabor y una graduación alcohólica superior. Los vinos tintos durante esta época del año suelen servirse a una temperatura media de unos 16º aproximadamente.
Para estos tintos, contamos con uvas Merlot, Malbec y hasta Carbernet. Alguno de los vinos Rioja, abundantes en sus estilos tintos; los Somontano o Cariñena, que los hay a precios bastante bajos y razonables sin mermar su calidad; o de DO del Bierzo, son vinos que realmente se podrán saborear con tales manjares para celebrar la Navidad.
Los vinos dulces se dejan para los postres, si bien podemos hacer excepciones en estos días, al ser el cava el que se tomará con los turrones, y probar para determinadas carnes, pero deben ser aves suaves, además de primeros a base de cremas y otros.