Lo primero que se me ocurre cuando hablas de un dulce típico portugués, lo que viene a la cabeza son los pastéis de Belém, pero como están ricos comerlos recién hechos o por lo menos es como me gustan comerlos a mi; pensé en otro dulce, parecido pero con otro tipo de masa y un parecido relleno, las queijadas, las más conocidas las de Sintra, vecinas de los pastéis de Belém.
Tostaditas por fuera pero tiernas por dentro.
Y con una base ligeramente crujiente, que sientas cuando das el bocado que está tierno el relleno.
En dos bocado se comen, tienen un ligero sabor a canela, y a diferencia de sus vecinos los pasteles de Belém, estas me gusta comerlas frías.
Sin más os cuento como he hecho estas dulces ilusiones, que son muuuuuy fáciles de hacer.
La receta original es con queso fresco pero yo tenía muchas tarrinas de mascarpone y quise probar, el resultado... perfecto, una variante que he horneado perfecta para repetir.
Ingredientes para la base:
125gr de harina
1 cucharada de mantequilla
2 cucharadas de agua
una pizca de sal
Ingredientes para el relleno:
250gr de queso mascarpone
125gr de azúcar
2 yemas
30 gr de harina
50 ml de leche
1 cucharada de canela
Lo primero es hacer la masa, hay que hacerla con antelación, al menos con dos horas. Mezclamos todos los ingredientes y amasamos, si lo hacemos en la thermomix ponemos los ingredientes en el vaso y mezclamos 10 seg velocidad 6 y luego 2 minutos velocidad espiga. Es como una masa de pizza, un poco elástica. La envolvemos en papel film y al frigorífico que repose.
Cuando vayamos a hacer nuestras queijadas mezclamos todos los ingredientes del relleno, en la thermomix todo en el vaso vel 4 hasta que veamos que todos los ingredientes están integrados. Reservamos.
Precalentamos el horno a 200º.
Engrasamos el molde con mantequilla o spray desmoldante, molde para hacer tartaletas, yo he usado el que uno para los cupcakes o magdalenas.
Estiramos la masa, que quede finita y cortamos del tamaño de algo mas grande que la base de nuestro molde, las queijadas son bajitas por lo que no tienen que ser altas.
Ponemos nuestro relleno en una manga pastelera, por comodidad y vamos rellenando las tartaletas, algo mas del borde de nuestra masa, luego subirán.
Horneamos de 15 a 20 minutos, dependiendo de nuestro horno. Ya sabéis que son tostaditas.
Desmoldamos, dejamos enfriar y listas para comer.
Tostaditas y mirar la base como queda
Mi catador oficial no se pudo resistir y probó una aún cuando estaba templada.
Veis el grosor de la masa?
Y ya lo único que queda es disfrutar, con estos días de calor lo mejor acompañarlas con algo fresquito como leche fría con un toque de canela aunque lo mejor un café con hielo, ese rico café portugués.
Recordaros que hemos viajado hoy al país vecino gracias Pili de Tothom a la cuina y el reto Reposteras por Europa.
Pasaros por allí y podréis ver todas las ricas dulces ilusiones que han hecho mis compañeras.
Volveremos a viajar con otra dulce ilusión en septiembre pues Reto Reposteras por Europa cierra en agosto por vacaciones. Mientras tanto seguiré horneando luchando con este calor o quien sabe lo mismo no, hay muchas dulces ilusiones que no necesitan horno.
Hasta pronto y a disfrutar...con Sweet Cookies by Bea.
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