¿Quieres un postre muy fácil de preparar? Mira la receta de esta quesada con leche evaporada y queso fresco batido, porque cuando la hagas, te darás cuenta de que está tremendamente rica y que es muy fácil de hacer. Básicamente, es una versión de la quesada pasiega, pero con un toque algo diferente, ¡sigue leyendo!
La quesada es uno de esos postres que son muy agradecidos, esos que son muy fáciles de preparar -que hasta el más torpe de la casa lo puede hacer- y luego están de rechupete. Versiones de la clásica quesada pasiega hay muchas, yo vi la receta de la quesada en Cocinario y decidí cambiarle algunos ingredientes, incluyendo la leche evaporada y el queso fresco batido.
Originalmente, la quesada proviene del Valle del Pas, en Cantabria, por eso se le llama quesada pasiega. Sus ingredientes básicos son leche cuajada, azúcar, huevos, mantequilla, harina, canela y limón. Supongo que en cada zona la harán de una manera diferente y a saber cuál es la original.
Lo que tengo muy claro es que el éxito de la receta radica esencialmente en la calidad de los ingredientes que empleemos y, en el caso de la original quesada, sería la leche (leche fresca). En mi versión no pasiega con leche evaporada y queso fresco batido importa menos, ya que usaremos muy poca, y realmente, los protagonistas son estos dos ingredientes.
¡Apunta ya la receta de este delicioso postre!
Ingredientes (molde cuadrado de 18 x 18 cm):
300 ml de leche entera
200 ml de leche evaporada
150 g de queso fresco batido
150 g de harina de trigo
100 g de mantequilla
250 g de azúcar blanca
2 huevos (tamaño L)
La ralladura de medio limón
1/4 cucharadita de canela
Preparaciónde la quesada con leche evaporada y queso fresco batido:
1. Engrasa un molde de 18 x 18 cm con mantequilla y encendemos el horno a 180 ºC.Tiene que quedar finita, así que no uses un molde demasiado pequeño
2. Pon todos los ingredientes, excepto la harina, en el vaso de la batidora y bate hasta que esté todo bien mezclado. Añade la harina en 3 ó 4 tandas a medida que vas batiendo.Tamiza la harina antes de añadirla, así evitarás que quede algún tipo de grumo
3. Vierte la mezcla en el molde enmantequillado y hornea a 180 ºC durante 45 min o hasta que veas que ha cuajado por completo y está dorada la superficie. El tiempo de horneado dependerá tanto de tu horno como del molde empleado.
4. Saca del horno y deja enfriar. ¡Listo, ya puedes degustarla! Si la comes templada será un postre maravilloso, ya verás.
No te imaginas lo bien que sienta el café con un trocito de esta quesada
¿Qué pasa si no tienes leche evaporada o queso fresco batido?
- Con la leche evaporada conseguiremos una textura más cremosa pero sin resultar tan pesada como la nata (crema de leche). Es fácil encontrarla en el mercado (marca Ideal o marca blanca), pero si finalmente no dispones de ella, usa leche entera tal cual o, también, una mezcla de leche entera y nata (crema de leche) (400 + 100 ml).
La leche evaporada es una leche deshidratada parcialmente, de tal manera que es un producto muy denso en nutrientes. Va fenomenal para recetas dulces como la quesada de hoy o esta tarta de calabaza y para recetas saladas en sustitución de la nata (crema de leche), como puedes ver en estos mejillones al estilo belga.
- El queso fresco batido se está poniendo ahora de moda entre los deportistas, por su gran aporte de proteinas y su bajo contenido en grasa, así que no tendrás problemas en encontrarlo. En caso de que tengas que sustituirlo, usa un yogur simplemente, natural o con sabor a limón. Ambos productos funcionan muy bien y le darán un toque ácido estupendo a nuestra quesada.
El queso fresco batido 0% MG tiene la ventaja de ser menos calórico y aportar menos grasa que el queso fresco convencional. Igualmente, es muy versátil en la cocina, te vale tanto para recetas saladas en sustitución de productos natosos, como esta salsa de queso para crudités o para postres light, como esta mousse de yogur con cereales integrales.
Espero que pongas en práctica la receta de esta quesada con leche evaporada y queso fresco batido, ¡no te vas a arrepentir!
Un saludín.
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Fuente: este post proviene de El Saber Culinario, donde puedes consultar el contenido original.
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