Hoy os traigo una quiché super rápida que os puede salvar de un compromiso si tenéis invitados en casa, si no sabéis que hacer para cenar o si simplemente os apetece salir de picnic y no sabéis que llevar.
Esta quiché de bacon y cebolla es muy fácil de hacer porque vamos a usar una masa quebrada ya preparada (de las que venden en el super) y un bacon que ya viene troceado.
3, 2, 1... Empezamos!
PREPARACIÓN
1. Cortamos la cebolla por la mitad y luego cortamos cada mitad en tiras (nos quedaran como medios aros)
2. En una sartén con aceite bien caliente, sofreímos la cebolla con un poco de sal (no os paséis porque el bacon ya es salado) y cuando este casi lista añadimos el bacon y le damos un par de vueltas.
3. En un molde redondo tipo quiche añadimos la masa y la extendemos bien por todos los bordes. A continuación incorporamos el sofrito de la cebolla y el bacon y lo repartimos bien.
4. En un bol batimos los huevos junto con la leche y después cubrimos la quiché.
5. Precalentamos el horno a 180º y horneamos durante 20-25 minutos. El tiempo, como siempre, va a depender del tipo de horno que tengáis así que cuando la veáis dorada y los bordes de la masa estén hechos, la podéis sacar.
6. Solo nos quedará esperar a que se enfríe y disfrutar.