Hoy teníamos ganas de risotto, y hemos preparado uno muy sencillo y nada tradicional. El risotto de calabaza es una comida deliciosamente reconfortante, esta versión está basada en la receta tradicional italiana al que le hemos añadido unas gambas salteadas con harissa, que podéis sustituir por un poco de chile, si os gusta el picante y es fácil de hacer, un plato que no es demasiado pesado, perfecto para cualquier época.
El risotto se elabora tradicionalmente con arroz arborio o carnaroli, así como con algunas otras variedades de arroz regionales. Arborio es el más común y se encuentra fácilmente en la mayoría de los supermercados, aunque muchos expertos dirían que el carnaroli es mejor si se puede encontrar.
Estos (así como algunas otras variedades de arroz italiano) son de grano corto lo que le da la textura adecuada al risotto. Obtienes ese gran equilibrio entre ligeramente masticable y sin demasiado almidón.
La combinación con las gambas resulta muy sabrosa, y el punto picante es fantástico, en lugar de parmesano, he puesto queso fresco, ya queda muy meloso con la calabaza, os animo a probarlo.
INGREDIENTES:
1/2 calabaza (pelada y sin semillas).
media cebolla
un trozo de puerro.
12 gambas rojas
1 taza de arroz arborio
2 chalotas (pequeña/mediana)
1 diente de ajo
1 cucharada de aceite de oliva AOVE
2 cucharadas de mantequilla
1/2vasito de vino blanco
3 tazas de caldo ligero de pescado.
queso fresco.
1 harissa en polvo o copos de chile.
1 pizca de pimientaELABORACIÓN:
En primer lugar preparamos un puré de calabaza, salteamos el puerro y la cebolla en una cucharada de mantequilla, añadimos la calabaza troceada y lo cocemos todo con caldo o agua, trituramos y ya tendremos el puré.
En una sartén, pondremos un poco de aceite, la chalota picada y el ajo, salteamos las gambas con un poco de harissa en polvo, reservamos las gambas y dejamos la chalota.
Pondremos a calentar el caldo.
En la misma sartén, pondremos una cucharada de aceite, añadimos el arroz y lo salteamos un poco para que tome el aceite, añadimos el vino y cuando evapore, le pondremos el caldo caliente poco a poco, movemos y a los 5 minutos añadimos el puré de calabaza, un poco de pimienta negra, e iremos incorporando caldo hasta que en unos 12 a 15 minutos veamos que está en su punto, ponemos la cucharada de mantequilla para que quede brillante, le añadimos las gambas peladas y lo dejamos reposar tapado 5 minutos.
Para servirlo le añadimos el queso y perejil picado.