A la tradición de las uvas de Año Nuevo, seguida de la música del concierto de sones clásicos desde Viena que me alegran el corazón un año más con la melodía del Danubio Azul, seguía la ilusión de la llegada de los Reyes Magos de Oriente.
La noche de Reyes ha sido mágica para nosotros cuando éramos pequeños y cada año me visita la niña que aún habita en mí para hacerme sentir esa magia en el corazón. No sé explicarlo con palabras, pero es una sensación que me reconforta. Se me inunda la mente de recuerdos que ahora plasmo mientras envuelvo con ilusión muchos de los regalos. Aunque de pequeña me fijaba en el interior de los regalos mientras mis padres esperaban atentos a mi reacción, ahora he descubierto que el regalo es ver la sonrisa o gesto de ilusión que puedo despertar en ellos o la cara de emoción de mi abuela al llevarle un bizcocho por su 95 cumpleaños.
Estamos rodeados de regalos que nos dan las personas que tenemos a nuestro lado y no cuesta nada. No hay necesidad de hacer innumerables colas e ir con estrés a todos lados. Disfrutemos de la esencia de estas fiestas. No perdamos en norte, encontremos nuestra Estrella de Oriente personal en las personas que hoy tenemos la suerte de acompañar y que están a nuestro lado.
Podría decirse que los Reyes Magos vienen con un Roscón bajo el brazo y es muy bonito que estas tradiciones no se pierdan, al igual que las cabalgatas.
En casa continuamos con la tradición de elaborarlo un año más. Me resisto a comprarlo pudiendo elegir mis propios ingredientes o decorarlo a mi gusto.
Este año he vuelto a hacer 2 roscones con la masa de 1 grande. Uno ha sido tradicional con nata (crema de leche) y el otro es éste que os presento: con crema pastelera a la vainilla, ganache de chocolate con miel y cerezas confitadas. Una variante deliciosa de la receta que siempre sigo, la de Ibán Yarza, que tantas alegrías nos trae por estas fechas. ¿Ganas de probarlo?
¡Vamos a la cocina que empezamos!
Ingredientes para dos roscones de 420 grs. aprox.
Prefermento:
- 90 grs. de harina de fuerza
- 2 grs. de levadura fresca
- 50 grs. de leche
La masa:
- 120 grs. leche
- Piel de media naranja
- Piel de medio limón
- 3 cucharadas ron
- 2 cucharadas agua de azahar
- 80 grs. azúcar
- 2 huevos
- 340 grs. harina de fuerza
- prefermento
- 15 grs. de levadura
- 5 grs. sal
- 60 grs. mantequilla punto pomada
Relleno de crema:
- 500 ml. leche
- 100 grs. azúcar
- 1 vaina vainilla
- Cáscara medio limón
- 50 grs. maicena
- 3 yemas
- 30 grs. mantequilla
Ganache chocolate
- 75 ml. nata (crema de leche) para montar
- 75 grs. chocolate cobertura
- 1 cdta. miel o golden syrup
*cerezas confitadas para decorar
Preparación:
Comenzamos elaborando el prefermento. Es mejor si lo hacemos la noche antes. Mezclamos la levadura con la leche tibia. Añadimos la harina en un bol y mezclamos con una cuchara. Hacemos una bola y lo dejamos reposar toda la noche cubierto con papel film.
También aprovechamos para infusionar la leche. Añadimos las cortezas de limón y naranja a la leche y dejamos hervir unos 5 minutos. Colamos y dejamos enfriar. Conservamos en la nevera.
Para la masa pondremos en un bol o amasadora la harina, el prefermento, la levadura y demás ingredientes excepto la leche. Amasamos ligeramente.
Añadimos el agua de azahar y el ron a la leche. No debe pesar más de 120 grs. en total. Si faltara, añadimos más leche. Amasamos y cuando esté bien integrado todo, dejamos reposar 10 minutos.
Por último añadimos la mantequilla en varios pasos y dejamos reposar otros 10 minutos. Volvemos a amasar y añadimos un poco más de harina si hiciera falta. El aspecto es pegajoso pero con el amasado nos quedará una masa suave tipo brioche.
Dejamos reposar en un bol con un poco de harina y tapado con film transparente hasta que doble el volumen. Todo dependerá de la temperatura ambiente. A mí me tardó 3 horas.
Una vez levado amasamos de nuevo para expulsar el aire y damos forma a uno o dos roscones según queramos. Boleamos y con dos dedos haremos un agujero en el centro. Le daremos forma y lo pondremos en la bandeja de horno con papel vegetal. Dejamos reposar media hora o hasta que suba de nuevo. Tapamos con un paño.
Precalentamos el horno a 190 grados. Pintamos con huevo batido nuestro roscón. Podemos poner un cortador redondo para que no se nos cierre el centro.
Horneamos 20-25 minutos. Comprobamos que la base esté bien hecha. Cuidado porque se dora enseguida. Podéis poner papel de aluminio si no queréis que se dore demasiado mientras termina de hornearse. Dejamos enfriar en rejilla.
La crema pastelera podéis hacerla mientras leva la masa del roscón o el día antes. Como os venga mejor.
Vertemos en un cazo la mitad de la leche con la vaina de vainilla y la cáscara de limón. Dejamos infusionar unos minutos, colamos y reservamos.
Mezclamos la otra mitad de la leche con el azucar, la maicena y las yemas. Una vez bien disuelto, añadimos a la leche infusionada. Removemos a fuego lento hasta que hierva. Añadimos la mantequilla removemos hasta su disolución. Reservamos en un cuenco con papel film a piel.
Decoramos nuestro roscón con la crema en manga pastelera.
Para la ganache hervimos la nata (crema de leche) hirviendo vertemos sobre el chocolate troceado en un bol. Esperamos 1 minuto y removemos mientras añadimos la cucharada de miel. Decoramos el roscón con la ganache y unos minutos después colocamos las cerezas confitadas. Dejamos decae un poco y llevamos a la nevera. Consumir en un par de días
"Parece una corona" fue lo que dijo mi madre al verlo. No he probado nunca ninguna variedad diferente al roscón de nata (crema de leche) y trufa. Hay gente que lo compra y lo rellena de crema de avellanas o cabello de ángel. Creo que opciones hay muchas.
A mí me ha impresionado la combinación de la crema pastelera con la masa aromatizada de cítricos del roscón. Pienso que le va ideal y el contraste con la ganache de chocolate y cerezas, cierran un círculo de emociones para nuestro paladar. Quién lo prueba repite, puedo asegurarlo y voy a incluir la crema pastelera entre los rellenos estrella de los roscones. Si, señor!
Espero que os haya gustado la receta y os animéis a decirme de qué sabor os gustan más los roscones, cuál os gustaría probar y si no hay roscón en tu país ¿Con qué dulce celebráis estas fechas?
Vuelvo pronto con más recetas y más historias.
Un abrazo enorme,
Maribel García
Fuente: este post proviene de Fresas con Chocolate, donde puedes consultar el contenido original.
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