No es ningún secreto mi amor por el blog Kanela y Limón. Fue el primer blog de cocina que miré en su dia para buscar una receta y el que me inspiró cuando abrí el mío.
Han pasado varios años desde entonces, y hoy puedo decir que tras esas maravillosas fotos y esas recetas que siempre salen bien se esconde Cristina, alguien que se ha convertido en parte importante de mi vida, alguien a quién corro a explicarle lo bueno que me pasa y llorarle en los momentos malos que últimamente no han sido pocos.
He encontrado a alguien cariñosa y muy divertida,una amiga más allá de los blogs de cocina...y eso chicos no tiene precio.
Estas rosquillas de hojaldre están en su blog, y esta entrada se la dedico a ella,a sus buenos consejos y a los largos ratos de charlas por teléfono.
Receta fácil y rápida que nunca va mal cuando tienes poco tiempo y quieres hacer algo rico.
INGREDIENTES
2 placas de hojaldre fresco
mantequilla derretida para pegar las placas
azúcar para rebozar
*Almibar
80gr de agua
80gr azucar
80gr de miel
ELABORACION
Juntamos las placas de hojaldre pintándolas con mantequilla fundida con la ayuda de un pincel. Pasaremos el rodillo por encima para que queden bien juntas.
Cortamos las rosquillas (yo he usado un molde de galletas y la base de una boquilla para el agujero del medio), y con la masa sobrante yo hice un par de napolitanas con chocolate en pastilla dentro :)
Colocamos las rosquillas en una bandeja en horno precalentado a 220º y cocemos unos 15 minutos o hasta que las veamos doradas.
Para hacer el almibar calentaremos los tres ingredientes en un cazo hasta que veamos que el azúcar se deshace y la mezcla empiece a espesar. Dejaremos templar.
Cuando se enfrien las rosquillas, las bañaremos en el almíbar y las rebozaremos en el azúcar.
Si no las vais a consumir en el día guardarlas en un tuper grande bien tapadas, aunque cuando las tengáis terminadas dudo que duren mucho más allá de un par de horas.