Los buñuelos de manzana son deliciosos y fáciles de hacer. En menos de lo que imaginas vas a estar disfrutando su sabor y textura inigualables. Llamdos también buñuelos de viento, pero en esta oportunidad con el agregado de manzanas, que lo hacen más húmedo aún.
Si ya los conocés me darás la razón, y si aún no sabes de ellos, te recomiendo que pruebes esta receta en la merienda de hoy y luego me cuentes.
La receta original de miscosillasdecocina.com está perfumada con canela, pero yo prefiero esencia de vainilla. Por lo que realicé ese pequeño cambio. Si a vos te gusta la canela, la cantidad es de 1 cucharadita para esta cantidad de masa.
Ingredientes para hacer buñuelos de manzana
La receta rinde para 20 a 22 buñuelos– 1 manzana pelada y descorazonada (100 gr aprox)
– 1 huevo
– 150 gr de harina 0000 (o harina leudante, en ese caso debés descartar el polvo de hornear)
– 2 ctas de polvo de hornear
– 75 gr de azúcar
– Pizca de sal
– 1 cta de escencia de vainilla
– 40 cc de leche
– Aceite para freir cantidad necesaria
– Azúcar impalpable o glass para espolvorear
Preparación de los buñuelos de viento con manzana
1- En un bol mezclar la harina, polvo de hornear (o harina leudante sola), y la pizca de sal.2- Pelar la manzana, quitarle las semillas y cortar en trocitos pequeños. También se puede rallar. Reservar.
3- En otro bol batir con batidor de mano el huevo con el azúcar hasta que esté bien integrado. Añadir la leche y la esencia de vainilla y mezclar. Agregar la preparación de harina y mezclar nuevamente hasta tener una pasta homogénea.
4- Añadir las manzana y mezclar.
5- Colocar el aceite en una olla o sartén y llevar al fuego. Cuando esté caliente, freir los buñuelos. Con la ayuda de dos cucharas, tomar masa con una y dejar caer con cuidado en el aceite mientras se empuja con la otra cuchara para vaciarla.
6- Cocinar hasta que estén dorados. Retirar de la fritura y colocar sobre papel absorvente para quitar el exceso de aceite.
7- Pasar los buñuelos a una bandeja y espolvorear azúcar impalpable.
Una vez que estén fríos, se pueden comer acompañados de un rico café, té o con la infusión que te guste. Lo mejor es compartirlos en familia o con seres queridos.
Fuente: miscosillasdecocina.com