Llevo ya días sin aparecer y no es que haya dejado la dieta no, pero ahora en invierno me es más difícil seguirla a rajatabla. Además he tenido varios eventos que me fueron imposible rechazar y que sin quererlo pequé.
Así que aun no habiendo llegado al peso que en un principio quería perder he optado por pasarme a consolidación para no recuperar los kilos perdidos. Es una mezcla de crucero y conso, a mi manera, con una comida de gala a la semana, mis jueves de proteínas y una rebanada de pan integral al día (cuando me acuerdo)
Cuando pasen las fiestas intentaré retormarla en serio. De momento os traigo una recetita que si se puede comer en dukan.
Ingredientes:
- 1/4 de sangre de pollo cocida
- media lata de tomate triturado
- una cebolla
- orégano
- sal y pimienta molida
Preparación:
Normalmente la sangre viene ya cocida y en tacos de 500gr yo utilicé sólo la mitad. Partimos a cuadritos y en una sarten ponemos un poquito de aceite untado con una servilleta. Ponemos los trozos y damos unas vueltas hasta que cambie de color y se ponga más oscura, como negra. Sacamos y apartamos en un plato.
En esa misma sarten pochamos la cebolla picadita y cuando lleve como 10 minutos añadimos el tomate triturado, la sal, la pimienta y el orégano. Cuando el tomate esté hecho añadimos la sangre frita. Damos unas vueltas para que todo tome gusto y ya está lista la receta.
El sabor de la sangre es parecido al hígado, sólo que más blandita.
Así es como solía comerla cuando tapeaba por Melilla.