Según he leído, y según como se llaman, se ve que son unos panecillos que los escoceses usan para sus desayunos. Se sirven calentitos y los acompañan de lo que más les guste. Claro está que no deja de ser un pan, y no solo sirve para el desayuno, pero ellos los llaman así, así que yo... mantengo su nombre original que para eso están!!! :-)
En principio no me habían llamado mucho la atención pero no sé... me apetecía probar a hacerlos y la verdad que han resultado muy ricos y blanditos. Para acompañar cualquier comida o hacer un bocadillito van muy bien y tienen muy buena miga.
Yo como siempre... no puedo evitar no meter mano en todas las recetas que cojo de cualquier sitio, así que... normalmente estos panecillos van pintados de leche antes de hornear y ya está pero yo he hecho de 3 clases distintas. Todos pintados con leche, pero unos espolvoreados con harina, otros con azúcar y otros con sal gorda. Así tengo variedad y además, que me apetecía probar diferentes cosas!!! Que si no experimentamos no sabemos lo que nos gusta más o lo que nos gusta menos, no? :-P Al menos yo pienso así!!! :-)
Por cierto, la receta original la saqué del blog La historia detrás del plato. Como siempre nombro la fuente de donde saco alguna de mis recetas, es justo nombrar este blog ya que he sacado la receta de estos deliciosos bollitos de allí :-) Lo que es justo, es justo, y ahora toca nombrar la fuente :-)
Ingredientes:
450 gr de harina de trigo + un poco para espolvorear
2 cucharaditas de sal
20 gr de levadura fresca
150 ml de leche (yo uso desnatada en casa) + 2 cucharaditas para pintar por encima de los bollitos
150 ml de agua tibia
Y empezamos la fiesta!!! :-) Perdonad pero es que me encanta hacer pan, no sé lo que tiene... pero me gusta amasar, me gusta tocar su textura, me gusta hacer las diferentes formas, ver como leva tanto en el bol como dentro del horno... es todo un proceso que me encanta cada paso!!!! :-)
Mezclamos la harina y la sal por una parte. Por otra parte mezclamos la levadura con la leche para deshacerla y luego le ponemos el agua. Amasamos bien para que quede una textura homogénea y dejamos reposar. Como es habitual, tenemos que dejar que leve al menos el doble de su volumen, todo depende de la temperatura de donde lo tengamos, ya que cuanto más frío haga, más tardará en levar y necesitaremos más tiempo. Una vez ha levado, hacemos los bollitos que queramos. Yo he hecho unos más pequeños y otros un poco más grandes. Los aplastamos un poco para que se quite el aire y darle forma con el rodillo o con la mano si os apañáis bien y listos para dejar que leven de nuevo.
Y solo queda pintarlos con leche y espolvorearlos ya sea con harina, sal gorda, azúcar o lo que más nos guste, o tal cual, dejarlos así pintados con leche simplemente que quedan muy bien igual. Eso ya... como siempre digo, a vuestro gusto :-)
Al horno unos 20 minutos a 200ºC y a comer!!! Según dice la receta, calentitos están muy buenos (yo diría que como cualquier tipo de pan jejejeje) pero bueno, luego están buenos igualmente :-) Quedan esponjosos, con una buena miga, perfectos para acompañar cualquier comida o para hacerse un bocadillo, ya sea salado o dulce.