El desayuno es mi comida preferida porque es el momento en el que suelo comer fruta, sobre todo en forma de smoothies o batidos. Generalmente suelo tomar batidos más líquidos pero de vez en cuando me preparo un smoothie bowl. Suelen ser más densos, se comen con cuchara y se les suele echar varios toppings por encima (fruta fresca, semillas, frutos secos, frutas secas, coco rallado, copos de avena, trocitos de chocolate o lo que se te ocurra).
Ya compartí una receta de smoothie bowl en el blog, pero era de chocolate y mantequilla de cacahuete (¡está de muerte!). Esta receta es más ligera pero está igual de rica, sobre todo si te gustan tanto los frutos rojos como a mi.
Por si no lo sabes, publicamos una encuesta en el blog porque queremos tener en cuenta vuestra opinión. Estamos encantados con todas las palabras y muestras de cariño que hemos recibido y con el alubión de encuestas que nos habéis enviado, sin vosotros no estaríamos aquí.
Aún no hemos tenido tiempo de leernos todas y aún siguen llegando más, pero las hemos mirado por encima y muchos de vosotros nos sugerís que las entradas a veces son muy largas y tienen demasiadas fotos, así que intentaremos que a partir de ahora sean más cortas. También se me ha ocurrido incluir una sección de consejos al final de cada entrada explicando además cómo podéis sustituir los ingredientes, así que no resulta tan repetitivo y al que no le interese puede saltárselo y pasar directamente a la receta. ¡Esperamos que os gusten los cambios!
Si tu batidora no es muy potente puedes usar 4 plátanos frescos en vez de 2 congelados y 2 frescos. Si aún así le cuesta batir, prueba a echar más leche vegetal. Te recomiendo que congeles los plátanos en trocitos pequeños (así son más fáciles de batir) y los dejes desde la noche anterior en el congelador.
Puedes utilizar la leche vegetal que quieras.
Nos encantan los dátiles Medjool, pero puedes usar cualquier otra variedad. Si no encuentras dátiles o son muy caros para ti, utiliza cualquier otra fruta seca o tu endulzante preferido (sirope de arce, de agave, azúcar de coco, melaza, etc).
Los arándanos congelados suelen ser mucho más económicos que los frescos, aunque los frescos mantienen todos sus nutrientes intactos y por lo general están más ricos. También puedes sustituir los arándanos por cualquier otro fruto rojo o por otra fruta.
Si eres celíaco o no puedes tomar avena, no te preocupes, no se la eches, la receta también quedará muy rica.
En vez de semillas de chía puedes usar cualquier otra semilla (yo también suelo echar semillas de lino o de sésamo) o eliminar este ingrediente.
Si no te comes todo el smoothie bowl puedes conservarlo en la nevera sin problema, aunque lo ideal es que lo consumas en un máximo de 2 ó 3 días.
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Prep
Cocción
Total
Me encanta comer este smoothie bowl de arándanos para desayunar, es muy sano y nutritivo y está muy rico. Te animo a que lo pruebes.
Autor: Danza de Fogones
Tipo de receta: Desayuno, Postre
Cocina: Vegana, Sin Gluten
Raciones: 2
Ingredientes
4 plátanos (2 congelados + 2 frescos)
½ taza de leche de almendras (125 ml)
4 dátiles Medjool u 8 Deglet Nour
1 taza de arándanos congelados (155 g)
¼ taza de copos de avena (40 g)
1 cucharada de semillas de chía
Toppings: rodajas de plátano, coco rallado, frambuesas frescas, almendras (crudas y sin sal) y copos de avena.
Instrucciones
Pon todos los ingredientes en la batidora y bate hasta que estén bien integrados.
Decora con tus toppings preferidos. Yo le he echado: rodajas de plátano, coco rallado, frambuesas frescas, almendras (crudas y sin sal) y copos de avena.
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