Una sopa perfecta para estos fríos días de invierno, muy completa, consistente y reconfortante, para levantar el ánimo como dice Silvia.
He sido muy fiel a la receta.
Así que apunta los ingredientes y a cocinar.
Ingredientes para 4 personas:
1/2 repollo
1 puerro
1/2 pimiento rojo
2 tomates maduros
1 cucharada de pimentón picante
Caldo de verdura o ave
1 hoja de laurel
Aceite de oliva
Sal y pimienta.
Para las albóndigas:
200 g de carne picada de ternera y cerdo
2 ajos y perejil picados
1 huevo
Sal y pimienta
Pan rallado
Harina
Elaboración:
Lavar, trocear el repollo y ponerlo a escaldar en agua hirviendo unos minutos con una pizca de sal. Retirar y reservar.
Lavar el puerro, el pimiento y trocear en trocitos pequeños.
Lavar los tomates, escaldar, quitar la piel y cortar en trocitos muy pequeñitos.
Poner aceite en una cazuela y rehogar el puerro, seguidamente el pimiento, cuando coja color agregar el tomate. Cocinar unos minutos que se vea tierno. Incorporar el repollo. Espolvorear la cucharada de pimentón picante o normal al gusto. Remover.
Agregar el caldo, poner la hoja de laurel y salpimentar al gusto. Dejar cocer 15 minutos a fuego bajo.
Para preparar las albóndigas:
Mezclar las carnes picadas, salpimentar, añadir los ajos y el perejil muy picados, el huevo, un poco de pan rallado (yo pongo pan del día anterior humedecido en leche o caldo). Mezclar todo bien.
Hacer bolitas pequeñas, enharinar. En una sartén con aceite caliente freírlas ligeramente.
Agregarlas a la sopa y dejar cocinar 10 minutos más a fuego lento.
¿A que tiene muy buena pinta la sopa de repollo y albóndigas?