La idea es aprovechar lo que tengáis en la despensa.
Yo he aprovechado unas manzanas que estaban un poco feas, y unos barquillos que tenía de las Navidades, pero luego lo dejo todo a vuestra imaginación. Veréis que rico está y que nutritivo a la vez.
6 Yogures
120gr azúcar moreno
1,5 kg Manzana
1 cucharadita de zumo de limón
piel de 1 naranja
Galletas, barquillos, semillas
1 ramita de canela
Empezaremos haciendo la compota de manzana. Yo he calculado cantidad para 6 raciones. Ya veréis que es un gran recurso cuando tenemos fruta que está un poco fea. Antes de tirarla la podemos aprovechar de ésta forma y mantenerla en la nevera hasta una semana.
Pelamos las manzanas y la troceamos.
Ponemos en un cazo el agua, el azúcar, las gotas de limón y la piel de naranja. La piel de la naranja va a aromatizar ligeramente nuestra compota, dándole un toque muy agradable, y además combina muy bien con la manzana.
Llevamos a ebullición a fuego medio para que el azúcar se disuelva poco a poco y dejamos un par de minutos hasta que se forme un almíbar. Debe ser casi un jarabe, sin que llegue a ser caramelo, debe ser ligero porque seguirá cociendo con las manzanas. Ahora añadimos la ramita de canela.
Ahora añadimos las manzanas y la piel de la misma, ya que contiene mucha pectina, que es soluble en agua y es un gran espesante, así que de forma natural conseguiremos este efecto sin tener que añadir más azúcar.
Cocinamos a fuego lento hasta que las manzanas adquieran un color pardo y estén blanditas (unos 40 minutos).
Hay que estar muy atentos durante este proceso para que no se nos seque. En ese caso, añadiremos un chorrito de agua y seguimos la cocción sin problema.
Sacamos las cáscaras de fruta y la ramita de canela y podemos guardar en un recipiente de cristal hasta que vayamos a utilizarla. La podemos conservar perfectamente hasta 1 semana. (Siempre tapada).
Cuando vayamos a montar nuestro plato, tenéis 2 opciones, templar la compota o servirla fría. A mí personalmente me gusta templadita, pero os puedo decir que en mi casa hay variedad de gustos y opiniones al respecto.
Elegimos el recipiente donde lo vamos a presentar, y ponemos en el fondo nuestra compota.
Batimos un poco el yogur que hayamos elegido y lo ponemos sobre la compota. Yo he elegido yogures naturales desnatados.
El toque final queda a vuestra elección. Yo he aprovechado unos barquillos que he troceado, y una mezcla de semillas (lino dorado, pipas de calabaza y de girasol).
¿Os apetece sorprender a vuestra pareja en San VAlentín con algo tan rico como ésta compota con yogur?.
Ya me contaréis los resultados.
BUEN FIN DE SEMANA