Hace unos días les conté acerca de un Strudel de Manzanas que hice en casa y nos gustó mucho a todos; coincidiendo con esta publicación, me dieron a probar un Strudel diferente donde se mezclan gustos que, al menos nosotros, no estamos acostumbrados a mezclar pero al ver el resultado final es muy interesante combinarlos; decididamente voy a incorporar esta receta a mi lista de favoritos. Esperamos que ustedes la disfruten tanto como nosotros.
Ingredientes
1 masa para tarta rectangular
250gr de ricota
100gr de panceta dulce
100gr de peras “Williams”
100gr a pan rallado
1 yema de huevo
Queso rallado “Parmigiano”
2 ramas de tomillo
Preparación
Calentar el horno a 180 grados por 20 minutos.
En una sartén antiadherente, sin aceite, saltear a fuego medio por unos pocos minutos, la panceta cortadas en cubos chicos, ésta eliminará un poco de su grasa e inmediatamente después agregar las peras cortadas, también, en cubos chicos. Apagar el fuego y dejar enfriar. Mientras tanto, lavar bien las ramas de tomillo, secarlas y separar las hojas de la rama.
En un bols mezclar la preparación ya fría de la panceta y las peras con la ricota, el queso rallado, el pan rallado y las hojas de tomillo.
Extender la masa sobre una superficie bien limpia y apenas enharinada; incorporar el relleno y cerrarla formando el Strudel. Hacer algunos cortes sobre la masa y pintarla con la yema de huevo.
Colocarla sobre una fuente cubierta con el papel para horno y cocinar por 25 minutos; una vez listo dejar enfriar antes de comer.