La propuesta del Reto Cocinamos con Reina de este mes nos lleva hasta Melilla con uno de sus ingredientes típicos: el couscous. Isa nos daba carta blanca y lo podíamos preparar como más nos gustase, así que me decidí por una de las formas más sencillas y refrescantes: Taboulé o ensalada.
Taobulé es la denominación de una ensalada típica del norte de África cuyo ingrediente principal es la sémola de trigo (ya sea trigo bulgur o couscous) con tomate, pepino, cebolla,... y aderezada con aceite de oliva, zumo de limón y especias aromáticas.
Tradicionalmente el couscous se prepara en un recipiente especial, la cuscusera, que consta de dos partes: en la parte de abajo se cocina la carne y verduras y en la parte superior se pone el couscous que se cocina aprovechando el vapor de la cocción de la parte inferior.
Para los que no disponemos de este recipiente, lo podemos elaborar con lo que tenemos en casa. De hecho, me ha sorprendido lo fácil que es preparar el couscous y la gran cantidad de recetas que podemos adaptar con este ingrediente. Me quedo con ganas de probar el couscous típico marroquí con carne de cordero y verduras. Espero prepararlo pronto.
Ingredientes (4 personas):
- 250 gr. de couscous
- 250 ml. de agua
- 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
- Sal
- 1 pepino
- 1 tomate grande
- Medio pimiento rojo
- Medio pimiento verde
- 1/4 de cebolla
- Zumo de un limón
- Pimienta negra molida
- Especias Ras al hanout
Modo de preparación:
En primer lugar, prepararemos los ingredientes frescos. Lavaremos el pepino, el tomate y los pimientos. Pelaremos el pepino y la cebolla. Y los cortaremos todos a cubitos pequeños. Cuanto más picadito mejor.
Exprimiremos el zumo del limón. Cuidado con que no caigan las pepitas del limón, nos aseguraremos de retirarlas.
En un bol pondremos: una cucharada de aceite de oliva, los ingredientes frescos que hemos picado, el zumo de limón y un poquito de sal. Lo meteremos en la nevera mientras preparamos el couscous.
Para preparar el couscous es conveniente seguir las instrucciones que se indican en el envase, ya que pueden ser diferentes dependiendo de dónde lo hayamos comprado. En mi caso, puse a hervir 250 ml. de agua con una cucharada de aceite de oliva y una cucharadita de sal.
Cuando el agua empieza a hervir, se retira del fuego y se le añade el couscous. Se deja reposar durante unos 2 o 3 minutos. Durante ese tiempo el couscous va absorbiendo el agua y se va hidratando.
Pasado ese tiempo, le añadiremos una cucharada de aceite de oliva y lo moveremos para que los granos de couscous se separen y no aparezcan apelmazados unos con otros. El couscous debe quedar suelto.
El paso final es mezclar el pepino, el tomate, los pimientos y la cebolla con el couscous. Lo especiaremos con un poquitín de pimienta molida, con dos cucharadas de Ras al hanout y sal (si hiciera falta).
Os recomiendo tomarlo fresco. Yo lo metí en la nevera una hora antes de ser consumido.
Como sugerencia de presentación os aconsejo emplatarlo como en la foto. Es sencillo, sólo necesitaremos un aro emplatador o algo redondo que se le asemeje. Pondremos el aro sobre el plato y dentro iremos poniendo el couscous. Cuando el aro esté lleno, aplastaremos con una cuchara el couscous para que tome forma y con cuidado retiraremos el aro.