Hacía tiempo que no preparaba una tarta sin horno.
La última, estas Navidades en la que preparé una tarta sencilla de semifrío de turrón que quedó impresionante. No sé por qué en Navidad, cuando hace frío, nos apetece tomar también postres helados, ¡jeje! El caso es que ahora va llegando el buen tiempo, sigue haciendo un poco de fresco, y la lluvia no nos deja, y eso es bueno porque este año por el sur no ha llovido demasiado, y por eso me apetecía enseñarte a hacer esta deliciosa tarta cheesecake de mermelada de arándanos sin horno.
Los arándanos, y en general todos los frutos del bosque (berries, en inglés), son mis frutas preferidas. Los arándanos, en particular, son el pilar de mis desayunos. Un cuenco con arándanos frescos me acompañan cada día. Aparte de por su sabor, sus propiedades y beneficios para la salud son muy importantes. Aunque la mayoría de los arándanos que se venden en España son de Estados Unidos, de Marruecos o de nuestros invernaderos del sur, en el norte de España se pueden encontrar en la propia naturaleza. Al ser un arbusto que necesita frío, se da muy bien en el norte de Europa, pero también en zonas como la Cordillera cantábrica, Galicia y los Pirineos. Recuerdo haber pasado mis veranos en Panticosa (Huesca), en pleno Pirineo aragonés, y haber comido arándanos mientras paseábamos por sus montañas. ¡Qué maravilla cuando podíamos hacer esos viajes, ¿verdad?!
Los arándanos son ricos en antioxidantes y en vitamina C. Entre los beneficios que nos aportan cabe destacar la prevención y tratamiento de las infecciones urinarias, la prevención de la degeneración del cerebro y el control de la hipertensión ayudando a la prevención de enfermedades del corazón y circulatorias.
Los arándanos frescos duran hasta 3 semanas en el frigorífico pero, te recuerdo que puedes congelarlos y seguirán conservando todas sus propiedades. Una forma muy tradicional de conservar las frutas es haciendo mermeladas. Aunque siguen conservando sus propiedades antioxidantes, con el calor otras se pierden. Para ello la solución es añadir más frutos a la mermelada, por eso las Mermeladas de Pazo de Vilane llevan un 70% de fruta entera recogida en su punto perfecto de maduración, lo cual hace que además de tener un sabor más intenso, no lleven tanta cantidad de azúcar como otras mermeladas.
Pero seguro que estás deseando saber cómo hacer esta deliciosa tarta de queso con mermelada de arándanos sin horno que he hecho con una rica mermelada de arándanos de Paso de Vilane. ¡Vamos a verla!
Tarta Cheesecake de Mermelada de Arándanos Sin Horno
Ingredientes
Para la base:
100 gr. de mantequilla derretida
2 cucharadas de miel de lavanda (o la que más te guste)
200 gr. de galletas digestive
1 cucharadita de canela molida
Para el pastel de queso:
6 láminas de gelatina
150 gr. de arándanos frescos
100 gr. de mermelada de arándanos Pazo de Vilane
600 gr. de queso en crema
150 gr. de azúcar
150 gr. de yogur griego
600 gr. de nata (crema de leche) para montar +35% M.G.
Para la decoración:
100 gr. de mermelada de arándanos Pazo de Vilane
100 gr. de arándanos frescos
Preparación
Para la base:En un cazo, derretimos la mantequilla junto con la miel. Retiramos del fuego y dejamos enfriar un poco.
Mientras, molemos las galletas y las mezclamos con la canela.
Mezclamos las galletas con la mantequilla hasta que tengamos una masa homogénea.
Cogemos un molde desmontable redondo de 20 cm y forramos con acetato los laterales. La base puedes forrarla con papel de horno. Yo usé un aro de cocina y la forré con papel de plástico.
Echamos la mezcla de galletas y aplastamos para que quede bien unida y cubra todo el fondo del molde.
Metemos en el frigorífico y reservamos.
Para el pastel de queso:
Ponemos las gelatinas en un bol con agua fría y dejamos que se ablanden. Reservamos.
En un bol grande, mezclamos el queso con el azúcar y el yogur. Dividimos en tres partes: 1 bol con 250 gr. de crema, otro con 300 gr. de crema y otro con 350 gr. de crema.
Mientras tanto, trituramos los arándanos y los ponemos en un cazo junto con la mermelada. Calentamos a fuego medio bajo. Le añadimos 4 hojas de gelatina, removemos y dejamos enfriar un poco. Dividimos esta mezcla en dos partes: una de 150 gr. y otra de 100 gr.
Los 150 gr. de mezcla de arándanos y mermelada lo mezclamos con los 250 gr. de crema; y los 100 gr. de arándanos y mermelada lo mezclamos con los 300 gr. de crema. Los 350 gr. de crema quedarán sin mermelada pero necesitan gelatina. Calentamos las dos hojas de gelatina que nos quedan y las mezclamos con los 350 gr. de crema que teníamos.
Montamos ahora la nata (crema de leche) a punto de yogur griego y repartimos 200 gr. en cada uno de los boles. Mezclamos bien. Recuerda que a medida que vayamos mezclando la nata (crema de leche) con la crema se volverá más densa.
Sacamos el molde del frigorífico y lo rellenamos primero con la mezcla blanca. Extendemos bien la superficie y damos unos golpecitos contra la encimera para que no queden huecos.
A continuación, echamos la mezcla más clarita, extendemos la superficie y damos los golpecitos.
Por último, echamos la mezcla más oscura y repetimos lo mismo que con las anteriores.
Cubrimos con papel de plástico y lo metemos en el frigorífico durante ocho horas (en la receta original pone al menos 4 horas, pero yo he preferido 8 horas para que quede perfectamente sólido).
Para la decoración:
Calentamos la mermelada en un cazo y cubrimos la superficie de la tarta con ella.
Decoramos con arándanos frescos, lavado sy secados.
¡A disfrutar!
*Recuerda que puedes congelar esta tarta y tomarla helada.
¿A quién le apetece un trocito?
La receta la he adaptado bastante de los pastelitos de queso de tres bayas del libro Boutique de Pastelería Peggy Porschen que me regaló mi querida amiga Rossy, de los cuáles ya había hecho yo una adaptación en estos mousses de queso y frutos del bosque que hice en versiones individuales y en los que utilicé también fresa y frambuesa. ¡A que tiene una pinta estupenda!
Te puedo asegurar que la textura de esta tarta es increíble. Es suave y su sabor espectacular. Los arándanos le dan una acidez perfecta para mi gusto que está contrastada con el dulzor del resto de las preparaciones.
Bueno, espero ver todas tus recetas por las redes, etiquetándome con @pattyscakebakery tanto en Facebook como en Instagram, para que pueda ver las maravillas que hacéis con mis recetas. Muchas gracias.
¡Hasta pronto!
Receta en colaboración con Saboresfera y Pazo de Vilane.
Fuente: este post proviene de Pattys Cake, donde puedes consultar el contenido original.
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