Una tarta de cerveza negra que llevaba tiempo queriendo hacer y que merece la pena porque está deliciosa!
La textura es como la de un bizcocho húmedo y compacto, pero al combinarlo con el frosting de queso la mezcla es mmmmmmm
La receta la he sacado de AQUÍ. Y necesitamos:
250 ml de cerveza negra.
250 g de mantequilla.
250 g de harina de trigo.
75 g de cacao en polvo (yo usé Nesquik).
1 sobre de levadura química.
300 g de azúcar blanco.
2 huevos.
1 cucharadita de vainilla líquida.
140 ml de nata (crema de leche) líquida para montar.
Empezamos derritiendo la mantequilla con la cerveza. Mientras, juntamos los ingredientes sólidos tamizándolos: harina, cacao, levadura y azúcar.
Mezclamos los huevos con la nata (crema de leche) y batimos. Cuando estén integrados, los añadimos a la cerveza y ponemos la vainilla. Ya tendremos precalentando el horno a 180 grados.
Después, vamos poco a poco añadiendo los sólidos. Mezclamos bien para que no queden grumos.
Engrasamos un molde y vertemos la mezcla. Cocemos a 180 grados unos 50 minutos.
Una vez cocido, dejamos enfriar antes de desmoldar. Esto es fundamental, porque yo no tengo espera y se me rompió mi lindo bizcocho!!
Pero bueno, con un poco de cuidado y el frosting casi no se aprecia, jeje.
Para la cobertura:
150 g de queso crema.
75 g de azúcar glas.
150 g de nata (crema de leche) líquida para montar.
Montamos la nata (crema de leche) y reservamos. Batimos el queso con el azúcar y le vamos añadiendo la nata (crema de leche) poco a poco. Si lo dejas en el frigo un rato estará más consistente, pero recién hecho se unta bien.
Y listo!
No puede estar más rica esta tarta de cerveza negra!!