Ingredientes:
Bizcocho genovés:
4 huevos medianos
120 g azúcar
1 yema
120 g harina de repostería
20 g mantequilla fundida
Almíbar:
200 g agua
200 g azúcar
30 g licor de fresa (nosotros lo compramos en Makro)
Chantillí:
500 g nata (crema de leche) para montar 35% de materia grasa, bien fría
20 g estabilizante de nata (crema de leche) (si queréis que quede bien firme y no baje)
50 g azúcar glas
Decoración:
100 g mermelada de albaricoque (la mejor para esto es la de la marca Hero)
20 g agua
300 g fresas
Bizcocho genovés:
Precalentar el horno a 180º C. Engrasar 2 moldes de 18 cm de diámetro.
Poner los huevos con el azúcar en el cuenco del robot de cocina y batir a mano 5 segundos. Poner el cuenco al baño María removiendo con las varillas (sin batir) hasta que alcance los 50º C. Pasar el cuenco al robot de cocina y batir con el accesorio de varillas a velocidad media-alta hasta que se enfríe (unos 12 minutos). Tiene que quedar a punto de letra o punto de cinta.
Pasar la masa a un cuenco grande, añadir la yema y mezclar con una espátula con movimientos envolventes.
Tamizar la harina e incorporarla al cuenco en tres veces, integrándola cada vez con la espátula con movimientos envolventes.
Por último mezclar con la mantequilla fundida a 45-50º C: poner un poco de masa en el cuenco de la mantequilla, mezclar con la espátula, pasar a la mezcla e integrar con movimientos envolventes.
Pasar la masa a los moldes y hornear a 180º C durante unos 25 minutos aproximadamente. Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla. Cuando estén templados envolver en papel de fil y dejar en la nevera que se enfríen totalmente (se pueden dejar hasta el día siguiente).
Almíbar:
Hervir el agua con el azúcar, añadir el licor de fresa, seguir cociendo durante 1 minuto y reservar.
Chantillí:
Poner la nata (crema de leche) y el estabilizante en el cuenco del robot de cocina con el accesorio de varillas y montar a máxima velocidad hasta que esté firme y tenga un aspecto mate. Incorporar el azúcar glas a cucharadas mientras seguimos batiendo a velocidad media. Subir de nuevo a velocidad máxima y batir unos segundos más. Guardar en la nevera hasta su uso.
Decoración:
Calentar 100 g de mermelada de albaricoque con 20 g de agua, mientras vamos removiendo con las varillas. Cuando esté bien integrado y haya hervido podemos pincelar las fresas con él.
Partir las fresas longitudinalmente y pintar con el brillo de albaricoque que hemos preparado.
Al sacar los bizcochos de la nevera, cortarles una rodajita fina de la parte superior (la parte tostada) para que queden más bonitos y se empapen mejor. Colocar un bizcocho y con un pincel mojar con el almíbar de fresa (que esté bien mojado), colocar una capa de chantillí (si queremos podemos también trocitos de fresa), colocar la otra capa de bizcocho y volver a empapar con el almíbar, colocar una capa fina de chantillí y colocar encima las fresas para decorar (podemos volver a darles más brillo una vez colocadas). Poner una capa fina de chantillí en las paredes de la tarta con ayuda de una espátula larga y plana.
Trucos / consejos / comentarios:
A Julián y a mí nos encanta la Mallorquina. No sólo sus bollos (que son una delicia), sino también sus tartas. Cuando podemos subimos al piso que tienen arriba para sentarnos en una de las mesas y tomarnos una ración de su fabulosa tarta de fresas y nata (crema de leche). Esta es nuestra versión casera y ha quedado muy parecida, aunque se me fue un poco la mano rellenando de nata (crema de leche), jeje. La preparamos el sábado pasado para una comida familiar y fue todo un éxito. ¡Síguenos en Twitter! https://twitter.com/Postreadiccion