Una tarta fresca, suave y apetecible. Su base de fino bizcocho y su textura muy cremosa y ligera, tipo mousse, convierten a esta tarta de lima limón en un postre perfecto para ocasiones especiales.
INGREDIENTES
para la base:
2huevos
60 gr de azúcar
60 gr de harina
para la mousse:
250 gr de queso crema
500 ml de nata (crema de leche)
150 gr de azúcar
el zumo de 4 limas y la ralladura de 1
6 hojas de gelatina
para la cobertura:
1 sobre de gelatina sabor limón
unas rodajas de lima
gominolas verdes
PREPARACIÓN
Empieza preparando el bizcocho: En un bol trabaja los huevos con el azúcar. Bátelos bien con la ayuda de las barillas eléctricas hasta conseguir una mezcla blanquecina y cremosa . A continuación tamiza e incorpora la harina y mueve con la ayuda de una cuchara de madera y con movimientos envolventes hasta que esté bien integrada y no haya grumos.
Engrasa un molde desmontable y vierte la mezcla. Introdúcela al horno precalentado, a 180º hasta que el bizcocho esté listo. Saca del horno y deja enfriar.
Pon la gelatina a hidratar, colocándola en un bol y cubriendo con agua fría.
Monta la nata (crema de leche) con 100 gr de azúcar y reserva en la nevera..
En un bol, mezcla la crema de queso con es resto del azúcar y la ralladura de lima.
En una cazuela pon al fuego el zumo de las limas. Cuando la gelatina esté hidratada escúrrela e incorpórala a la cazuela en el momento en que el zumo rompa a hervir. Apaga el fuego y mueve hasta que la gelatina quede bien disuelta. Deja templar ligeramente y añádela a la mezcla de queso y azúcar. Mueve de nuevo.
Incorpora ahora la nata (crema de leche) reservada y mezcla, procurando hacer movimientos envolventes para que no se baje. Vuelca la mezcla encima del bizcocho que tienes en el molde y mete en el frigo hasta que cuaje.
Solo queda preparar la cobertura. Cada marca de gelatina es distinta, así que las cantidades de agua a añadir dependen del fabricante. Prepárala según sus instrucciones, deja entibiar ligeramente y vierte con cuidado sobre la tarta. Vuelve a meter en la nevera hasta que cuaje de nuevo.
Decora con unas rodajas finitas de lima y trocitos de gominolas verdes.
Consejos y otras opciones:
aunque a mí me gusta especialmente la base de bizcocho de esta tarta, puedes optar por ponerle una base hecha con galletas.
para que la nata (crema de leche) monte bien es importante que esté bien fría. Métela unos minutos en el congelador antes de montarla.
si quieres un sabor más intenso a lima, añade más cantidad de ralladura
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