Nuestra ración dulce de este fin de semana ha venido de la mano de esta tarta de manzana y chocolate, que en realidad es más bien un bizcocho jugoso con pepitas de chocolate y coronado con manzana. Es una opción muy sencilla para cualquier domingo, que se prepara unas horas antes y que no necesita ni reposos ni mucha elaboración, por lo que se convierte en una propuesta genial para cuando tengáis visita en casa.
INGREDIENTES:
360 gr. de harina de repostería
8 gr. de levadura química tipo Royal
200 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
180 gr. de azúcar
1 cucharadita de extracto de vainilla
3 huevos
260 ml. de crema agria (podéis hacerla en casa vosotros mismos, añadiendo dos cucharadas de zumo de limón a 260 ml. de nata (crema de leche) líquida y dejarla reposar durante unos minutos antes de añadirla)
60 ml. de leche entera
150 gr. de pepitas de chocolate
1 o 2 manzanas (según tamaño)
3 cucharadas de azúcar morena
PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a 175º, calor arriba y abajo. Mezclamos la crema agria con la leche y reservamos. Tamizamos la harina junto con la levadura, también reservamos. Batimos la mantequilla junto con el azúcar hasta obtener una preparación cremosa (yo en la Kitchen Aid, pero podéis hacerlo con cualquier batidora de varillas).
Añadimos los huevos, uno a uno, no añadiendo el siguiente hasta que se integre el anterior. Añadimos también el extracto de vainilla sin dejar de batir. Vertemos después un tercio de la mezcla de harina y levadura. Agregamos la mitad de la crema agria y la leche, y seguimos batiendo. Añadimos de nuevo otro tercio de la harina y después el resto de la crema agria y la leche. Por último añadimos el último tercio de la mezcla de harina y batimos hasta que se haya integrado todo. Le ponemos una cucharada de harina a las pepitas de chocolate (esto evitará que caigan al fondo al añadirlas a la tarta) y removemos bien. Agregamos, por último, las pepitas de chocolate y mezclamos con la masa. Engrasamos un molde desmontable (el mío de un diámetro de 20 cm.), forramos la base con papel vegetal y vertemos la masa, dando golpecitos sobre la encimera para que se distribuya bien. Nivelamos la superficie con una cuchara o espátula porque la masa resulta espesa. Lavamos y cortamos la manzana o manzanas en láminas. Ponemos las manzanas sobre la superficie de la tarta, en círculos concéntricos y una encima de otra, es decir, un poco acaballadas, y espolvoreamos con azúcar morena.
Introducimos en el horno y horneamos hasta que al introducir una brocheta ésta salga limpia. Yo lo tuve poco más de una hora, pero si lo hacéis en un molde más grande, la tarta os quedará algo más bajita pero necesitará menos tiempo de horneado. Sacamos del horno una vez horneada, dejamos enfriar dentro del molde y desmoldamos cuando esté fría.
Si os gusta que lleve más manzana podéis pelar una manzana y añadirla troceada a la masa, reduciendo un poco la cantidad de chocolate. Es una opción más para los amantes de las tartas de manzanas.
Espero que os haya gustado. Feliz lunes.