Los postres con gelatina son ideales cuando el calor aprieta, la tarta de queso fría en vasitos con gelatina de limón y mermelada de fresa casera es otra magnífica opción. También puedes hacer dulces fríos con cuajada como el flan de quesitos con cuajada y la tarta de cuajada y chocolate con frambuesas.
Para much@s el postre es tan importante como la comida e incluso más, te sugiero que guardes esta receta de tarta de piña sin horno a buen recaudado para poner un punto y final de lujo a tus menús veraniegos, está buenísima, triunfarás sin duda alguna.
No te compliques la vida y remata las comidas y cenas de verano con una tarta de fruta sencilla y a la vez deliciosa. La puedes preparar con antelación y será suficiente con que la dejes reposar al menos 6 horas en la nevera. Para garantizar que la tarta está perfectamente cuajada, y así evitar sorpresas desagradables a la hora del desmoldado, es recomendable hacer este tipo de tartas el día anterior. Yo lo hago siempre de este modo, al hacerlas de un día para el otro tendremos la completa seguridad de que nuestra tarta no se desmoronará al retirarla del molde.
Sea cual sea la ocasión quedarás de lujo con esta tarta de piña sin horno ¿Me acompañas a la cocina?
TARTA DE PIÑA SIN HORNO
INGREDIENTES:1 lata de piña en almíbar (grande)
1 litro de nata (crema de leche) líquida / crema de leche ( para montar)
2 sobres de gelatina de piña
18/24 sobaos
Caramelo líquido
PREPARACIÓN:
Escurrir las rodajas de piña y reservar el almíbar.
Forrar un molde de 28 centímetros con film transparente para facilitar el desmoldado.
Cubrir la base con caramelo líquido y colocar las rodajas de piña encima.
Calentar el jugo de la piña hasta que levante ebullición. Retirar del fuego y agregar la gelatina. Remover hasta que se disuelva por completo..
Incorporar la nata (crema de leche) y mezclar bien removiendo con varillas.
Volcar la preparación sobre las rodajas de piña y colocar los sobaos cubriendo toda la superficie. Presionarlos ligeramente para que se introduzcan un poco en la crema.
Dejar cuajar la tarta de piña en el frigorífico mínimo 6 horas (mejor de un día para el otro).
Desmoldar dándole la vuelta, como si de un flan se tratase, sobre una fuente y servir.
Tendrás lista esta tarta de piña sin horno en cuestión de minutos, es una receta fácil y rápida perfecta para sorprender a tus comensales y dejarles muy buen sabor de boca cuando coman o cenen en tu casa.
Las frutas en almíbar nos pueden sacar de un apuro rápidamente, además de tener un postre listo simplemente abriendo una lata nos permiten elaborar infinidad de recetas sin trabajar demasiado. Antes de irte échale un vistazo a este pastel frío de melocotón en almíbar, estoy completamente segura de que te va a gustar tanto como a mí o más.
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