Te preguntarás cuál es el motivo de su éxito, pues muy sencillo; la tarta griega con pasta filo se caracteriza por su rica combinación de sabores y texturas que ha vuelto loco a más de uno. De hecho, desde que nosotros la conocimos ya han caído varias en casa.
Hoy te enseñamos su receta, para que tú también puedas deleitarte con los encantos de este pastel tan tentador. Si te interesa, sigue leyendo…
¿Cómo es el ruffle milk pie?
Como comentábamos al inicio de este post, el ruffle milk pie, tarta griega o tarta rizada de pasta filo es una original tarta que se elabora a partir de una mezcla de masa filo rellena de flan, lo que da lugar una combinación de texturas muy suculenta y divertida.
Por eso mismo, el resultado es una tarta crujiente por fuera (gracias a la consistencia de la pasta filo) y muy esponjosa, húmeda y blandita por dentro, debido al flan. Sin duda, se trata de una combinación que hará que comiences a babear nada más comenzar con la elaboración de esta tarta.
Además, esta tarta tan vistosa que tiene una forma de flor es ideal para preparar en celebraciones donde nos juntamos con amigos y familiares. Te advertimos que este pastel griego acaparará las miradas de todos los golosos de la fiesta. ¡Seguro que vuela, así que si quieres probarla date prisa en coger un trocito!
Ingredientes para la tarta griega
Que no te asuste la elaboración de esta tarta, porque su receta es realmente fácil y se hace muy pero que muy rápido. Los ingredientes que necesitarás para preparar esta tarta flor de pasta filo son estos:
10-12 láminas de pasta filo o pasta brick (más o menos un sobre).
60 gramos de mantequilla (a temperatura ambiente).
3 huevos.
1 vaso o 250 ml de leche entera.
120 ml de nata (crema de leche) para montar, con al menos un 35 % de materia grasa.
80 gramos de azúcar.
1 cucharadita de esencia de vainilla.
1 trocito de piel de limón.
1 ramita de canela.
Azúcar glas, para espolvorear por encima.
Si te preguntas dónde puedes encontrar la pasta filo o pasta brick en el supermercado, te diremos que se encuentra situada en la zona de frío, es decir, en las cámaras frigoríficas donde también podemos encontrar las masas de pizza, empanada o quiche.
¿Ya tienes todos estos ingredientes? Pues entonces ya puedes comenzar con esta receta de tarta griega con pasta filo o ruffle milk pie.
¡Comenzamos!
Receta de tarta griega con pasta filo o ruffle milk pie
Antes de comenzar con esta receta, te aconsejamos contar con espacio suficiente en la cocina para que puedas manejarte mejor. Prepara con calma el espacio de cocinado para que nada te estorbe y, cuando lo hayas hecho, ya podrás comenzar con esta receta:
En primer lugar, separamos con cuidado las láminas de pasta filo (ten cuidado en este paso por que se pueden romper). Cogemos la primera lámina de pasta filo y pintamos su superficie de mantequilla con un pincel. ¡Importante! La mantequilla tiene que esta blandita (a temperatura ambiente o un pelín derretida) para que se extienda bien por la superficie de la lámina.
A continuación doblamos la lámina en rectángulos, como si fuera un acordeón (unas veces para fuera y otras para dentro). Finalmente obtendremos un rectángulo, de unos 3 dedos de ancho, con muchas capas.
Enrollamos el rectángulo sobre sí mismo, dándole forma de flor. Y lo metemos dentro del molde redondo en el que vayamos a preparar nuestra tarta (de unos 12-16 cm de diámetro).
Repetimos el mismo paso con todas las láminas de pasta filo, y vamos enrollando cada rectángulo sobre la flor que inicial que hemos preparado. De esta manera, nuestro pastel será cada vez más grande.
Para que nuestra tarta tenga esa forma de flor que la caracteriza, será importante que las láminas de pasta filo queden apretaditas en el molde. En caso contrario, nuestra flor se irá deshaciendo.
Una vez hayamos terminado de enrollar las láminas de pasta filo, meteremos la tarta en el horno (a media altura) durante unos 12 minutos, a 180ºC. Hasta que la pasta filo comience a estar doradita.
Mientras tanto, iremos preparando el flan. Para ello, pondremos en una cazuela la leche junto a la nata (crema de leche), el azúcar, un trocito de piel de limón y una ramita de canela, para aromatizar. Cuando la mezcla comience a hervir, retiraremos del fuego.
En otro recipiente mezclaremos los huevos y la cucharadita de extracto de vainilla. Cuando la leche esté fría, la colamos y la agregamos a los huevos. Mezclamos bien durante unos minutos y ya tendremos nuestro flan.
Por último, sacaremos del horno nuestra flor de masa filo y verteremos el flan sobre ella. Tapamos con un papel de aluminio por encima (para que la masa no se queme) y volvemos a meter en el horno. Esta vez a 180ºC durante unos 20 minutos.
Pasado ese tiempo, el flan se habrá cuajado y nuestra tarta griega estará lista.
Si quieres, también puedes espolvorear azúcar glas sobre esta tarta para darle un toque más dulce y llamativo.
Deja reposar la tarta unos minutos antes de degustarla y probar lo crujiente y rica que está. ¡Seguro que te encanta!
Nosotros te recomendamos comer esta tarta a lo largo del día en la que la elabores, ya que si esperas más, la tarta perderá la textura crujiente que la caracteriza.
¡Bon appétit!