Esta es una tarta que en casa nos trae muy buenos recuerdos ya que la solía hacer mi suegra muy a menudo. Ella la hacía con uva crispa.
Yo he cambiado la uva por ruibarbo para aprovechar la temporada de esta fruta-verdura.
Además he querido hacer las fotos con su juego de café, esas tazas donde tantas y tantas tardes de domingo tomábamos la merienda.
Ella nos dejó en el mes de noviembre del 2021 y he querido recuperar algunas reliquias antiguas que iban a ir a la basura. Entre ellas, este juego de café y una fuente de interior de los años 50 que ya estaba olvidada en un rincón de la casa y que con retoques y arreglos ahora luce brillante y preciosa en la entrada de mi casa. Seguro que se sentirá orgullosa.
Este pastel es entretenido ya que se tiene que hacer dos bases iguales de la que se compone de un bizcocho fino y cubierto con merengue. De ahí lo de Mousse de nieve, ya que el merengue queda tanto en medio como en la base de arriba de la tarta.
Siempre digo, que si no encuentras el ruibarbo lo puedes cambiar por otra fruta o incluso utilizar la uva crispa, que es además, el ingrediente original de este pastel.
Tarta de Mousse de nieve con ruibarbo
Ingredientes
• 4 huevos (M),
• 125 gramos de mantequilla a temperatura ambiente,
• 125 + 200 gramos + 4-5 c/s de azúcar,
• Sal,
• 3 sobres de azúcar avainillado,
• 150 gramos de harina,
• 2 c/p rasas de levadura en polvo Royal,
• 5 c/s de leche,
• 4 c/s de almendra fileteada,
• 500 gramos de ruibarbo,
• 1 sobre para 500 ml. de leche de polvos de pudding con sabor a vainilla,
• 400 gramos de nata (crema de leche) para montar,
• Azúcar en polvo,
• Grasa para el molde.
Preparación:
Engrasar un molde redondo de 26 centímetros de diámetro.
Aquí recomiendo pesar el cuenco donde vamos hacer la masa ya que hay que dividirla en dos partes iguales, así sabemos cuánto pesa luego la masa. Hacemos lo mismo con el cuenco donde van las claras.
Separar las yemas de la clara.
Poner en un cuenco la mantequilla, 125 gramos de azúcar, una pizca de sal y un sobre de azúcar avainillado. Batir con la batidora con varillas hasta que esté cremoso. Cuando esté cremoso echar las yemas de huevo de una en una mientras seguimos batiendo.
Mezclar la harina con la levadura y tamizar. Id echándola y mezclando con una espátula a intervalos con la leche hasta formar una masa sin batir demasiado. Poner la mitad de la masa en el molde y alisar. Parece poca pero llega. Hay que ir estirándola bien para cubrir el molde. Sólo queremos una base fina.
Encender el horno a 175°C con aire.
Montar a punto de nieve fuerte las claras de huevo. Antes de que estén montadas por completo echar 200 gramos de azúcar en forma de lluvia mientras batimos. Batir hasta que el azúcar se haya disuelto.
Poner la mitad de merengue sobre la masa que tenemos en el molde y repartirla por encima.
Espolvorear 2 cucharadas de almendra y meter el molde en el horno durante 25-30 minutos. Sacar y deja unos 10 minutos enfriar. Desmoldar y enfría el molde por completo y vuelve a repetir lo mismo con el resto de la masa, merengue y almendra. Hornea y deja enfriar.
Mientras limpiar el ruibarbo y picarlo en trocitos. Colocarlo en un cazo con 100 ml. de agua y 4-5 cucharadas de azúcar. Lleva a ebullición, tapa y deja cocer unos 5 minutos a fuego medio.
Disolver los polvos de Pudding con 6 cucharadas de agua y verterlo en el cazo con el ruibarbo. Mezclar y sin dejar de remover deja cocer un 1 minuto más. Deja que pierda algo de temperatura.
Colocar una de las bases de bizcocho con merengue en un plato y cubrirlo con el ruibarbo bien repartido por toda la base. Dejar enfriar por completo en la nevera. Montar la nata (crema de leche) con los dos sobres de azúcar avainillado y cubrir ahora el ruibarbo. Colocar la otra base encima y espolvorear con azúcar en polvo antes de servir.
Abreviaturas
c/s = cucharada sopera
c/p = cucharada postre
c/c = cucharada café
c/n = cantidad necesaria