Esta receta es otra de las que he rescatado de los cuadernos de la abuela. Se trata de una torta de naranja con los sabores de los dulces tradicionales, como las antiguas bizcochadas pero con un gran sabor a naranja y aceite de oliva. Realmente es sorprendente lo buena que está y podemos hacerla con ingredientes que siempre solemos tener por la cocina.
Ingredientes:
2 huevos
1 taza de aceite de oliva
1 taza de azúcar
1 taza de leche
2 tazas de harina
el zumo de dos naranjas
canela molida al gusto
1/2 cucharadita de bicarbonato
En un recipiente amplio ponemos los huevos, el aceite, la leche y el azúcar. Batimos hasta que la mezcla quede homogénea.
Añadimos el zumo de naranja y la harina tamizada junto con el bicarbonato y la canela. Mezclamos bien todo el conjunto y lo ponemos en un molde para hornear.
Precalentamos el horno a 180º y metemos el molde.
Como siempre os suelo decir, el tiempo de horneado depende del horno. La dejamos hasta que suba y la parte superior tome un bonito color dorado.
Es importante no abrir la puerta del horno durante los primeros 15 minutos.
Una vez hecha, esperamos a que se enfríe y la servimos.
Podemos acompañarla con lo que más nos guste (chocolate, crema pastelera, nata (crema de leche)?)
Como propuesta os dejo la que yo hago cubriéndola con una mermelada casera de higos y almendras tostadas.
Fuente: este post proviene de Me sabe a Málaga, donde puedes consultar el contenido original.
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