Cuando vimos este par de truchas en el mercado nos vino a la memoria la melodía del lied “Die Forelle”, que compuso Franz Schubert sobre un poema de Christian Friedrich Schubart, que empieza: “En un claro arroyuelo,/ se precipita alegremente/ la trucha juguetona, /que pasa como una flecha./ Yo estaba en la orilla/ y en un dulce sosiego/ vi el baño del alegre pececito/ en el claro arroyuelo. Un pescador con su caña.”.
A partir de él, Schubert compuso el quinteto para piano, violín, viola, violonchelo y contrabajo en La Mayor D 667, también llamado Forellenquintett (Quinteto La Trucha), en 1819 cuando tenía 22 años. Este dulce discurrir de la trucha por las aguas acaba inevitablemente con su captura, momento en que la melodía adopta un tono más vivo porque el pescador agita y enturbia las aguas, antes cristalinas.
Nuestra propuesta de hoy es que, aparte de cocinar este par de bellos ejemplares, los degustéis con la música de fondo del 4º movimiento del quinteto de Schubert, un Andantino con variaciones sobre la melodía del lied original. El placer puede ser doble.
RECETA
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INGREDIENTES
1 trucha por persona
3 o 4 patatas
2 dientes de ajo
Pimienta
Sal
Aceite de oliva virgen extra
1 limón
Unas ramas de perejil
Mezcla de hierbas
1 vaso de vino blanco
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PREPARACIÓN
Cortar las patatas en rodajas de 1cm aproximadamente. Meterlas 10 minutos en el microondas con un chorrito de agua.
Poner un poquito de aceite en la base de la fuente del horno. Colocar por encima las patatas cubriendo la fuente por entero. Poner un poco de sal y unas hierbas (en nuestro caso la mezcla tiene pimiento, orégano, cebolla, perejil y ajo).
Lavar y secar bien las truchas. Salpimentar y colocar sobre las patatas.
En un mortero machacar dos dientes de ajo y unas ramitas de perejil. Añadir el vino blanco y echar sobre las truchas.
Echar por encima un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Poner unas rodajas de limón y meter en el horno precalentado a 180º durante 30 minutos.