Ya sabéis lo que me gusta una tarta de queso, y a la vez también los postres en vasitos, de forma individual. Pues se me ocurrió fundir ambas cosas para preparar los deliciosos cheesecake de limón en vasitos. Este año el limonero de mi suegro está un poco vago, no produce mucho, la verdad es que sólo lo imprescindible, aunque tengo la suerte de que me regalen limones, como los que usé el otro día para el sorbete o estos otros que son limones de Martos, que me traje de la casa de Rosa Marchal el otro día. Aunque las hojas de limonero que aparecen en las fotos si son del limonero de mi suegro. Utilicé la misma receta que tengo publicada de cheesecake de mango, sin base, y cambiando los mangos por limones. El resultado es un postre refrescante, que se prepara sin hornear y que se puede ir cogiendo del frigorífico cada vez que queramos uno.
INGREDIENTES (para tres vasitos como los de la foto):
200 gr. de queso crema
200 ml. de nata (crema de leche) para montar
125 ml. de zumo de limón
140 gr. de azúcar
4 hojas de gelatina neutra
40 gr. de gelatina en polvo de limón
250 ml. de agua
PREPARACIÓN:
Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría. Después preparamos un almíbar con el zumo de limón y el azúcar. Una vez que llegue a ebullición dejamos durante unos cinco minutos más al fuego. Añadimos la hojas de gelatina, ya hidratadas, y removemos hasta integrar éstas. Dejamos enfriar la mezcla una media hora.
Montamos la nata (crema de leche) bien fría con la ayuda de unas varillas. Reservamos. Montamos un poco también el queso crema. Mezclamos nata (crema de leche) y queso con movimientos envolventes, con la ayuda de una lengua de silicona, para que no se nos baje. Vamos vertiendo poco a poco el almíbar de limón, sin dejar de mezclar, también con movimiento envolventes. Tenemos que conseguir una mezcla sólida, sin que se vea nada de líquido. Vertemos la mezcla en los vasitos e introducimos en el frigorífico para que cuajen.
Una vez cuajados prepararemos la cobertura, es decir, la gelatina de limón. Para ello preparamos la gelatina de limón según las instrucciones del fabricante. Yo puse gelatina de limón de LIDL. Hervimos 125 ml de agua y añadimos la gelatina en polvo, removemos, añadimos otros 125 ml. de agua, ésta fría. Y seguimos removiendo hasta integrar todo. Sacamos los vasitos y añadimos la gelatina sobre ellos. Metemos de nuevo en el frigorífico hasta que cuaje. Si nos sobra gelatina la vertemos en un vasito y dejamos cuajar, los niños darán buena cuenta de ella.
No será el último postre en vasito que pase por aquí este verano. Son muy cómodos de preparar y muy fácil de tomar y transportar, en caso de llevar a alguna reunión. Por lo que son la mejor opción para el verano.
Feliz fin de semana.
Lidia.