Empezamos 2019 con una receta que tenía muchas ganas de hacer, nos habían retado a preparar Whoopies y tenía en pendientes desde hace tiempo esta receta que había visto en “La cocina de Tarta de Fresa”, sin embargo no he empezado el año con muy buen pie. He perdido en estos días a mi niña, mi perra Mafi murió el 14 de enero tras pasar 16 años a mi lado. Como seguro que la mayoría entenderéis, no tengo cabeza para nada y están siendo momentos muy difíciles, pero así es la vida y por desgracia nuestros animales no son eternos. Solo nos queda pensar que los quisimos con locura y les dimos la mejor vida posible.
Con todo esto me olvidé por completo del desafío, me acordé de milagro el último día y me puse manos a la obra, se me hizo tarde y ya no había luz natural así que aquí tenéis unos whoopies riquísimos hechos a la carrera y fotografiados con la favorecedora luz del fluorescente de la cocina. En fin.
La masa queda bastante líquida en comparación con otras que he visto, creo que quedaría mucho mas vistosos usando una bandeja especial para whoopies.
Ingredientes para los whoopies;
50 gr de azúcar
50 gr de mantequilla
1 huevo
100 gr de harina
1 cucharadita de levadura
1 cucharada de cacao en polvo
3 cucharadas de leche
Colorante rojo
Ingredientes para el relleno;
100 gr de queso de untar
35 gr de azúcar glass
vainilla
Batimos la mantequilla con el azúcar y cuando la mezcla esté esponjosa añadimos el huevo y mezclamos.
Tamizamos la harina con el cacao y la levadura. Añadimos con cuidado y movimientos envolventes esta mezcla a la que ya teníamos de mantequilla. Le ponemos también la leche en este momento.
Añadimos el colorante rojo hasta conseguir el color deseado.
Ponemos cucharadas de masa en la bandeja del horno (colocaremos papel de horno debajo para que no se pegue) separaremos las cucharadas de masa porque se desparraman en el horno. Horneamos a 180º durante unos 7-10 min.
Mientras se enfrían vamos preparando el relleno.
Batimos el queso con el azúcar y la vainilla hasta que obtengamos una mezcla homogénea. Reservamos en la nevera para que vuelva a coger consistencia.
Cuando los bizcochos estén fríos los rellenamos con la crema de queso.
Son unos bocados deliciosos, no dejéis de probarlos y ya de paso os invito a ver las maravillosas propuestas de mis compañer@s AQUI.