Veranito, veranito, nos gusta comer, cuidarnos y nos encanta una buena cervecita con un aperitivo. Hoy os traigo uno muy facilito de hacer y muy sano. Se trata de unas zanahorias encurtidas que podemos hacer en casa de forma muy fácil y rápida. ¿Os apetece? ¡Vamos allá!
Ingredientes:
Zanahorias: que sean grandecitas, yo he utilizado tres grandes.
Vinagre de vino.
AOVE.
Dos hojas de laurel.
Clavos de olor.
Pimentón dulce.
Sal.
Pimienta.Elaboración:
Lo primero que hay que hacer es pelar las zanahorias y cortarlas a rodajitas. Las vamos echando a un recipiente de vidrio donde vayamos a almacenarlas.
Llenamos un tercio de ese recipiente con vinagre, añadimos un chorrito de AOVE y rellenamos la parte que queda con agua.
A continuación, vertemos toda la mezcla en un recipiente apto para microondas; yo he utilizado mi olla hermética.
Ahora, añadimos todas las especias: laurel, clavo, pimentón dulce, sal y pimienta.
Llevamos al microondas durante 2 minutos a 900 vatios. El tiempo dependerá de la potencia del microondas, lo ideal es que hierva el agua y que la zanahoria quede al dente.
Cuando lo tengamos, volcamos todo en el recipiente que hayamos elegido para el almacenaje, preferiblemente de vidrio.
Dejamos enfriar y a la nevera. ¡Y listo! Cuando estén bien fresquitas podemos consumirlas con nuestra bebida favorita, también podemos añadirla a ensaladas o como acompañamiento de carne o pescado. Están deliciosas, espero que os gusten.
Mi pequeño consejo: Yo he utilizado AOVE de ajo, que consiste simplemente en dejar macerar dientes de ajo en el aceite, queda muy bien para este tipo de recetas, así como de ensaladas o pasta.