La primera vez que utilicé la avena para dar consistencia no me podía creer lo que mis ojos veían. Da homogeneidad y una textura estupenda a todas nuestras preparaciones en las que queramos sustituir el huevo.
Como guarnición una mezcla de 3 arroces, a cual más encanto y una salsita de tomate con alga espaguetti de mar y zanahoria. Un plato redondo.
Ingredientes para las albóndigas:
1 vaso de soja texturizada
1/2 vaso de avena
El agua que acepte, pero más o menos un vaso como mínimo.
Sal marina
Especias al gusto (yo he utilizado cayena molida, comino, albahaca seca y perejil seco)
Resto de ingredientes:
Mezcla de arroces (arroz rojo, salvaje y basmati)
1 cebolla
1 vaso de salsa de tomate troceado casero
1 zanahoria grande
Un puñado de soja texturizada
Un par de ramitas de alga espaguetti de mar
Salsa tamari
Un vasito de agua o caldo vegetal
Orégano seco
Pimienta negra
Aceite de oliva VE
Procedimiento:
Empezamos preparando las albóndigas. Ponemos la soja y la avena en un bol y le añadimos el agua, dejamos reposar unos minutos y vemos la textura que han cogido, si es buena seguimos adelante, sino, añadimos más agua hasta conseguir una masa manejable y consistente.
Incorporamos las especias al gusto y la sal marina. Dejamos reposar en el frigorífico unos minutos para que solidifique un poco más. Nos mojamos las manos, cogemos una pequeña porción de la masa y damos forma de bola, pasamos las albóndigas por harina y luego por pan rallado
El tiempo en que cogen cuerpo las albóndigas en la nevera, preparamos la salsa y cocemos el arroz.
Para la salsa; empezamos troceamos la cebolla y la zanahoria. En una cazuela ponemos aceite de oliva a calentar y sofreímos la cebolla. Cuando esté a medio pochar le incorporamos la zanahoria. Removemos y cocinamos unos minutos.
Incorporamos la salsa de tomate troceado y removemos para integrar todos los ingredientes. Cuando el tomate haya soltado su jugo añadiremos el vaso de caldo o de agua y dejaremos que llegue a ebullición. En este punto incorporamos el puñadito de soja texturizada (cantidad al gusto), las algas, un chorro de salsa tamari y la pimienta negra.
Sacamos las albóndigas del frigorífico y las freímos levemente en una sartén con un poco de aceite de oliva. Le damos color, vuelta y vuelta, las escurrimos y las añadimos a la salsa de tomate.
Lo cocinamos a fuego lento durante 10 minutos y lo servimos junto al arroz. Espolvoreamos orégano por encima del plato.
Nota: Si las albóndigas tienen una buena textura se pueden cocinar directamente en la salsa de tomate, ya que los ingredientes que las componen no requieren mucha cocción. De este modo ahorramos un par de calorías.